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Fiscalía: Al menos 4 menores habrían sido abusados en el Pequeño Cottolengo

A los dos casos conocidos se suman otros dos y "todos apunta a que habrían sido víctimas del imputado", reveló a Emol el vocero de la fiscalía de Rancagua, abogado Roberto Díaz.

02 de Agosto de 2005 | 12:52 | Bernardita Ochagavia M, El Mercurio en Internet
Menores descompensados
Los dos menores abusados, ambos varones de 13 y 17 años respectivamente, presentan un retardo severo, sin embargo, "uno de los menores no se puede expresar y el otro tiene un retardo mental también importante, pero puede hablar ese niño", afirmó el abogado Díaz.

- ¿Se les practicaron pericias médicas a los dos menores?

- A los dos se les practicaron pericias sexológicas y el resultado fue positivo, es decir, efectivamente en el ano presentaban lesiones compatibles con la introducción de un objeto contundente, de una violación sodomítica.

- ¿Las familias de estos menores están al tanto de lo ocurrido

- No tengo confirmación, pero se me ocurre que sí. Al parecer uno de ellos sería abandonado, pero tengo entendido que el mismo Pequeño Cottolengo informó a los otros familiares.

- ¿Cómo se encuentran los menores, están asustados?

- No sé porque son menores que no comprenden. Sí están descompensados. Están siendo ayudados por la Unidad de Víctimas y Testigos y desde ahí hay apoyo psicológico.

- ¿Se tiene certeza respecto de en qué lugar ocurrieron los hechos?

- Sí, en la Ruta H-30, camino a Doñihue y en una casa en la Población Blest Gana, a sólo 10 minutos de Rancagua. En ambas oportunidades el sacerdote trasladó a los menores.
SANTIAGO.- Al menos cuatro menores podrían haber sido abusados por el director del Pequeño Cottolengo, sacerdote J.E.G.E (42 años), según los antecedentes que maneja la fiscalía de Rancagua y que espera dilucidar en los próximos días.

Según confirmó a Emol el vocero de la fiscalía regional de Rancagua, abogado Roberto Díaz, pericias sexológicas habrían ratificado el caso de un tercer menor abusado -que se suma a los dos ya conocidos- y se esperan los resultados de un cuarto, sin que aún se puedan vincular a priori al sacerdote.

"Tenemos antecedentes de por lo menos dos menores más, además de los que ya habían. Sobre uno tenemos la absoluta certeza de que fue víctima de un ataque sexual, no tenemos antecedentes todavía para vincularlo al sacerdote. De ese menor, que tiene 6 años, ya nos llegó el informe pericial. Respecto del otro menor no tenemos los informes sexológicos aún", afirmó el jurista.

- ¿Por qué aún no se los puede vincular con el sacerdote?

- Estamos recién en eso. Por el momento aún no tenemos antecedentes que nos hagan presumir su participación. Estamos esperando el resultado de las pericias, estamos citando a testigos. Todo apunta a que también habían sido víctimas del imputado, pero no tenemos la certeza a través de los medios probatorios.

El sacerdote J.E.G.E se encuentra desde el sábado en la sección de imputados de la Cárcel de Peumo con prisión preventiva, tras formalizársele los cargos por dos violaciones sodomíticas ocurridas durante julio a menores con discapacidad que estaban internados en el Pequeño Cottolengo de Rancagua.

- ¿Cuánto tiempo podría permanecer ahí?

- Podría estar hasta dos años, que es el plazo máximo que dura la investigación. Pero la prisión preventiva podría ir variando si cambian las circunstancias. Nosotros creemos que él debiera permanecer privado de libertad hasta la realización del juicio oral.

- ¿A qué pena se arriesga el sacerdote?

- Según el artículo 368 del Código Penal lo mínimo sería a 10 años y un día y de ahí en adelante. Y entre los agravantes que podrían concurrir es el de abuso de autoridad o por la reiteración de delitos.

La denuncia provino desde el interior

Según explicó el abogado Roberto Díaz, la denuncia llegó a la Policía de Investigaciones a través de un testigo protegido del interior del Pequeño Cottolengo.

"Esta persona, al observar conductas anómalas de los menores y también del imputado realiza una especie de chequeo médico de uno de ellos y se da cuenta de las lesiones que presentaba en el ano y, por lo tanto, hace la denuncia", relata el profesional.

A juicio de Díaz, "un conjunto de hechos llevó a esta persona a concluir que algo extraño estaba pasando. Por ejemplo, varias salidas realizadas por el imputado fuera del Cottolengo con menores, sin que esa salida quede registrada en ninguna parte. Y al momento que llega el menor empieza con actitudes propias de un niño abusado. Se colocaba en posición para que fuera penetrado".

Entre el jueves pasado y ayer más de 20 testigos han declarado en la investigación que sigue la fiscal Carolina Suazo. "Al menos la mitad pertenece al Pequeño Cottolengo. Un gran porcentaje ha aportado antecedentes importantes respecto a la participación del imputado en la violación. Ninguno de estos testigos ha aportado antecedentes relacionados con el complot del cual habla la defensa".

- Respecto a las supuestas presiones que habrían recibido los testigos para no declarar en contra del sacerdote, ¿es eso efectivo?

- Al principio se dio harto esto, pero ya eso se fue decantando y no estarían siendo presionados. De hecho la declaración hecha ayer por el obispo de acá de Rancagua fue en ese sentido. Que aquí el que tenga algo que entregar que lo haga, que se sienta libre. Nosotros lo entendemos como un mensaje hacia las personas del Pequeño Cottolengo y también hacia estas personas que apoyan o timan al imputado por toda su trayectoria eclesiástica. Entendemos que el mensaje de (monseñor Alejandro) Goic es 'dejen que las instituciones funcionen'. Para nosotros fue positivo el mensaje, nosotros lo esperábamos en ese sentido de parte de la Iglesia y por suerte llegó durante la tarde.

- ¿Cuáles son los pasos a seguir en este caso?

- Estamos evaluando. Pero hay que descartar o confirmar que hayan existido más abusos y para eso hay que realizar pericias sexológicas a los menores del Pequeño Cottolengo. Además, seguir tomando declaraciones a testigos.
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