SANTIAGO.- En La Moneda continúan emitiéndose declaraciones para justificar el indulto entregado al militar en retiro Manuel Contreras Donaire, uno de los autores materiales del crimen del líder sindical Tucapel Jiménez el 25 de febrero de 1982.
El Gobierno aseguró que fue un gesto necesario para dar término a la transición "junto con las reformas constitucionales".
Además, se respondió a la familia Jiménez, que reclamó por no ser informada de la decisión gubernamental, apuntando que a las familias de las víctimas uniformadas tampoco se les informó cuando se entregaron beneficios a civiles.
En tanto, el ministro de Defensa, Jaime Ravinet, aseguró que el Presidente, Ricardo Lagos, actuó dentro de las facultades que la ley le otorga como jefe de Estado.
"Es una facultad que él ha usado otras veces", dijo Ravinet al comentar la situación de Contreras Donaire.
Al ser consultado si esto no podría entorpecer el proceso de reconciliación, Ravinet replicó que "la reconciliación pasa también por la clemencia y el perdón".
Ayer se entregó una conmutación de pena a Contreras Donaire, quien deberá cumplir los dos años y cuatro meses que le quedan de su condena a ocho años de cárcel bajo el régimen de libertad vigilada.
