SANTIAGO.- Por tres horas se extendió hoy el interrogatorio que realizó el ministro de fuero Víctor Montiglio al general (r) Augusto Pinochet en el marco de la investigación por la denominada "Operación Colombo".
La diligencia se llevó a cabo en el domicilio del ex gobernante, en el sector de La Dehesa, y fue el tercer interrogatorio a que es sometido Pinochet desde la semana pasada.
Los anteriores fueron realizados por el juez Carlos Cerda, que tiene a su cargo la investigación de las cuentas secretas que Pinochet mantenía en el extranjero, en las que acumuló una fortuna calculada hasta ahora en 27 millones de dólares.
El juez Cerda interrogará nuevamente al ex uniformado mañana a fin de aclarar algunos aspectos de las indagatorias anteriores.
La "Operación Colombo" fue una maniobra de la DINA para encubrir, en 1975, la desaparición de 119 opositores, y Pinochet está imputado en quince de los casos.
Según uno de los abogados querellantes del caso, Hernán Quezada, el interrogatorio de hoy "es la antesala del procesamiento" del ex gobernante.
"Desde el punto de vista de su salud mental no hay y nunca ha habido razones para dejarle fuera de un procesamiento", dijo Quezada.
"Entendemos que según los últimos exámenes médicos (ordenados por el juez Montiglio por instrucciones de la Corte Suprema), ha quedado más que claro que es una persona normal desde el punto de vista siquiátrico y por lo tanto no hay ningún obstáculo" para que sea procesado, añadió.
"Además, están las evidencias en su contra, las presunciones fundadas acerca de su participación en estos crímenes son numerosas, no hay duda alguna al respecto", agregó.
Montiglio resolvió interrogar a Pinochet tras recibir los informes sobre la salud del jubilado general elaborados por los peritos designados por el tribunal.
