TEMUCO.- El Ministerio Público de Collipulli formalizó los cargos por abuso sexual reiterado a una ex profesora del colegio Maica -Collipulli-, tras incurrir en tocaciones sobre una alumna de 13 años.
Debido a la cooperación prestada por la docente durante el proceso inicial de investigación, el Tribunal de Garantía determinó que E.R.V., de 40 años, tiene prohibido acercarse a la víctima (S.F.L., 13 años), no puede salir de la región y debe firmar cada quince días en la fiscalía de Victoria, mientras se realizan pericias caligráficas en Temuco para determinar la autoría de varias cartas que fueron encontradas en la agenda de notas de la menor, donde la profesora describe su relación de afecto con la niña.
Asimismo, Ricardo Traipe, fiscal del caso, puntualizó que la menor debe proporcionar nuevos relatos sobre los abusos y debe someterse a exámenes sicológicas para determinar la veracidad de éstos.
Los abusos sexuales sobre la menor quedaron al descubierto en octubre de 2004, cuando la abuela de la pequeña descubrió unas cartas en un block de notas, en cuyos escritos la profesora hacia referencia a una relación con la niña.
Impactada con este hallazgo, la abuela informó sobre la situación al director del establecimiento, quien dio cuenta al Departamento de Educación Municipal de Collipulli, a fin de someter a la docente a una investigación sumaria administrativa, con el fin de indagar en la relación que ambas mantuvieron, descubriéndose que en más de una ocasión la menor fue retirada del establecimiento por motivos de estudio, pero resultó que sólo eran excusas para reunirse.
De esta forma en julio de 2005 al concluir el proceso de investigación, el Daem decide expulsar a E.R.V. del establecimiento y el director estampó una denuncia en la fiscalía de Collipulli por abuso sexual.
Al tanto del hecho, Ricardo Traipe, fiscal del caso, requirió la declaración de la docente, quien reconoció los hechos, aclarando que eran una relación similar a la de madre e hija.
Si bien las cartas no hacen alusión a actitudes obscenas ni morbosas, algunos de los parrafos de las misivas dicen lo siguiente: "Menos mal que puedo regalonearte. No puedo acercarme a ti cuando están los demás. Ya me conoces como soy, debo frenarme y aguantarme", dice el escrito, según consigna el diario El Renacer de Angol.