SANTIAGO.- El director de la Policía de Investigaciones, Arturo Herrera, no descartó este viernes la versión entregada por el delincuente que perpetró un violento asalto en el centro de Santiago y por el abogado que resultó herido en dicha ocasión, quienes señalaron que los impactos de bala que recibieron provenían de los propios efectivos de la Policía.
Herrera señaló que primero hay que esperar que se resuelva la investigación que está realizando un fiscal del Ministerio Público, pero reconoció que frente a ese tipo de situaciones de crisis es posible que "se produzcan hechos impredecibles".
"Podría haberle ocurrido a cualquiera", acotó el jefe de la policía civil.
Ayer el defensor de los antisociales, Marcos Armesto, dijo que su cliente Marcelo Cortez asegura que él y el jurista Aldo González no quedaron heridos en un enfrentamiento, sino que fueron carabineros quienes les dispararon.
Los antecedentes
Según el relato, "Carabineros se dio cuenta de que algo extraño está pasando, y él y González se ven enfrentados a los policías, los que se retiran por el pasillo apuntando". Imputado y víctima se quedan en la oficina y "en ese momento el abogado le quita la pistola a Cortez, sale por el pasillo con el arma y los policías disparan pensando que era un secuestrador, hiriéndolo".
"Luego salió Cortez para decirles que el lastimado era abogado, pero los uniformados vuelven a disparar hiriéndolo a él, que se mete a la oficina y Carabineros sigue disparando hacia adentro", agregó.
Asimismo, el abogado González relató a un matutino que los uniformados le dispararon, porque por "largos minutos pensaron que era el delincuente y por eso no me prestaron la asistencia que requería rápidamente".
Marcelo Cortés y Luis Araneda, ambos detenidos, llegaron la tarde del pasado miércoles hasta un edificio de calle Huérfanos, donde simularon ser clientes para ingresar a un estudio de abogados, donde intentaron robar dinero y especies.
El cerco policial que se estableció en la zona motivó que los antisociales se parapetaran en el recinto, con cuatro personas como rehenes. Luego de unas cinco horas de negociaciones, los sujetos accedieron a liberar a los cautivos y entregarse.
