SANTIAGO.- La llamadas que hizo por su celular Jorge Martínez Arévalo, el principal sospechoso del crimen de Hans Pozo, darían nuevas pistas en el intrincado puzzle en el denominado caso del descuartizado de Puente Alto.
El fiscal Pablo Sabaj está a la espera de dos informes claves para establecer qué hizo Martínez entre el domingo y el lunes previo al crimen.
La investigación al celular de Martínez permitiría conocer con quién habló el sospechoso para determinar eventuales cómplices, e incluso sus desplazamientos, de acuerdo al registro de las antenas de la telefonía móvil.
Martínez se suicidó cuando la policía ingresó a su heladería para interrogarlo. Dejó una carta en que reconoce que conocía a Hans Pozo, que éste lo extorsionaba y que "era responsable y no lo soportaba".
