SANTIAGO.- En poder de los parlamentarios, alcaldes, académicos y organizaciones sociales se encuentra desde hoy la propuesta del Ministerio de Planificación que sustituye la Ficha CAS-Familia por un nuevo instrumento de acceso a los beneficios sociales del Estado.
Denominada "Ficha de Protección Social", el nuevo facsímil de medición de carencias busca constituirse en la puerta de acceso al sistema de protección social comprometido por la Presidenta Michelle Bachelet para el 2010.
La ministra de Planificación, Clarisa Hardy, anunció que los distintos sectores consultados podrán formular sus observaciones durante los próximos tres meses y cualquier ciudadano que lo desee podrá hacer lo propio a través de la página web del www.mideplan.cl.
Culminado el proceso de consulta a la ciudadanía, los alcaldes y los parlamentarios, se abrirá un lapso de dos meses para realizar el pre test y la validación de la ficha en terreno. Finalmente, entre noviembre y abril de 2007, se iniciará el reencuestaje nacional.
Al encabezar el acto de entrega del nuevo instrumento, la ministra Clarisa Hardy explicó que la ficha "nos permite identificar aquellas familias que están en situación de riesgo ¿Qué entendemos por situación de riesgo? La pobreza es un riesgo, también la infancia, que es una vulnerabilidad propia por el sólo hecho de ser niño, o la presencia en un hogar de una persona con enfermedades crónicas, la pérdida del empleo, el trabajo precario, los bajos ingresos, personas con discapacidad que no sólo no pueden ejercer un trabajo, sino que exigen muchas veces que otro miembro del hogar deba cuidarlos. Todos estos elementos están contenidos hoy en la ficha".
Añadió que la idea es contar con un instrumento justo y eficiente, es decir, que "realmente sirva para proteger a los que deben ser apoyados" y que se asigne a quienes corresponde.
Esta nueva herramienta que reemplazará a la Ficha CAS 2, proporcionará puntajes distintos según el beneficio a otorgar: subsidios monetarios, vivienda, salud y discapacidad, educación, etc. Habrá además un puntaje global para el ingreso al Sistema Chile Solidario.
La Nueva Ficha de Protección Social recabará información pertinente y precisa para seleccionar a las familias "elegibles", principalmente a través de la medición de ingresos, de las condiciones laborales y de la vulnerabilidad social. Será simplificado y reducido a 46 preguntas, en vez de las 65 de la ficha anterior.
Contiene indicadores cuya información es proporcionada por las familias y puede ser verificada, eliminando antecedentes "subjetivos" como la observación y apreciaciones personales del encuestador.
Incluye información regional y de zona urbano–rural, lo que permite tratar en forma diferente a las regiones que presentan costos de vida dispares.
Se premia el esfuerzo de educación y trabajo a través de incentivos para hacer uso de políticas sociales prioritarias, como aquellas relativas al cuidado infantil y de adultos mayores.
Se elimina factor de equipamiento del hogar
En suma, la ficha contiene variables relativas al tamaño y composición familiar (edad, sexo, parentesco, pertenencia étnica si la hay, núcleos familiares); ingresos y trabajo; salud y discapacidad; niveles y tipo de escolaridad; vivienda, en lo relativo a propiedad, hacinamiento y allegamiento. En cambio, desaparece toda información sobre materialidad de la vivienda y equipamiento del hogar, considerando que la encuesta Casen demostró que se trata de bienes de fácil acceso.
Otros cambios importantes apuntan a eliminar la definición estandarizada de la familia para entender como tal "una o más personas que residen en la misma vivienda y comparten un presupuesto de alimentación en común".
La presentación de la Ficha de Protección Social tuvo lugar esta mañana en un acto público realizado en la Municipalidad de La Granja, al que asistieron centenares de dirigentes sociales, parlamentarios, alcaldes, académicos y autoridades del área social del gobierno.
Principales modificaciones
Enfermedades catastróficas y crónicas: Mientras el instrumento antiguo no considera este tipo de factores, la Ficha de Protección Social capturará información sobre dificultades, enfermedades crónicas e invalidantes.
Bienes en el hogar: La Ficha Cas-Familia considera en el cálculo del puntaje la tenencia de ciertos bienes como lavadoras, refrigeradores, calefont, etc; en tanto que el nuevo instrumento no los incluirá en la medición.
Educación: La antigua ficha considera la educación como un elemento aislado, mientras que la nueva la concibe como parte de un conjunto de variables relevantes que permiten caracterizar la capacidad generadora de ingresos de todos los miembros de la Familia.
Allegamiento: El instrumento que deja de existir a partir de noviembre no distingue a los allegados internos de cada vivienda, en cambio la nueva herramienta sí identifica aquellas familias que están en condición de allegamiento. El hacinamiento es calculado considerando la vivienda.
Calidad del empleo: La Ficha CAS-Familia no incorpora preguntas que informen sobre las formas de precariedad del empleo, mientras la nueva sí contempla preguntas que indagan sobre la calidad del trabajo de las personas.
Situación regional: La antigua medición carece de un enfoque regional, en tanto, la nueva considera las diferencias regionales y por zona urbano/rural, pues esta variable determina el ingreso de las personas.
Pueblos originarios: El instrumento saliente no incorpora la variable de pertenencia a pueblos originarios, mientras que el nuevo sí consulta acerca del origen étnico.
Calle: La antigua herramienta no registra a personas en situación de calle, en cambio, la Ficha de Protección Social registra e identifica la condición de esas personas.
Subsidio: La Ficha Cas-Familia sólo codifica la recepción del subsidio, sin reportar el monto, mientras la nueva medición incluye tanto la recepción del subsidio como la suma que involucra.
Vivienda: La actual forma de medir las condiciones de la vivienda impide identificar grados de precariedad porque considera la presencia de determinados materiales y no los materiales predominantes. En el nuevo instrumento no se recoge información respecto a las condiciones de la vivienda sino a la tendencia de ella.