SANTIAGO.- Ante las nuevas tomas y paros protagonizados por estudiantes secundarios, la Presidenta Michelle Bachelet criticó las medidas de presión impuestas por los escolares para negociar reformas en el sector.
En alusión a la molestia de los dirigentes estudiantiles, que criticaron la omisión de sus demandas en el mensaje presidencial del domingo pasado, la Mandataria explicó -en entrevista con radio Cooperativa- que "el 21 de mayo no me referí a lo contingente".
Junto con ello, advirtió que los escolares no pueden pretender entablar un diálogo con las autoridades si al mismo tiempo pegan "patadas por debajo de la mesa".
"No he podido entender por qué, cuando uno ha sido miembro alguna vez de un sindicato, uno cuando anda negociando no anda pegando patadas por debajo de la mesa. Uno negocia y el día que la negociación es un fracaso, uno ahí pasa a otro tipo de medidas. En este caso se ha dado una cosa muy curiosa. Mientras se está negociando se quiere a la vez estar presionando. Eso es muy raro, sobre todo cuando hay muy buena disposición para el diálogo, pero no vamos a aceptar diálogos bajo presión", aclaró la Jefa de Estado.
En medio de las amenazas de los secundarios, luego que ayer los alumnos del Instituto Nacional dieran una semana de plazo a la Presidenta para que se pronuncie sobre su petitorio porque, de lo contrario, convocarán a una nueva marcha nacional, Bachelet dijo que las medidas de presión no son aceptables.
En todo caso, aseguró que el Gobierno está disponible para avanzar en aquellos aspectos que requieren de un cambio, como el arancel de la Prueba de Selección Universitaria, la tarifa del pase escolar y la Jornada Escolar Completa.
"Si yo quiero que puedan estudiar jóvenes de escasos ingresos, naturalmente, el arancel de la PSU no puede ser un obstáculo para esto. Claramente, creo que si el pase escolar tiene dificultades, tenemos que avanzar a eso y así han sido las instrucciones que le di al ministro de Educación, de Transporte y de Hacienda, que buscáramos las soluciones. También he sabido que hay una gran crítica de los jóvenes a la Jornada Escolar Completa y señalan que no estaría cumpliendo los objetivos buscados. Creo que eso es perfectamente posible de trabajar", aseguró la Jefa de Estado.
En ese sentido, recalcó que ella tiene "la mejor voluntad para que avancemos y francamente no entiendo esta sensación de que no hay voluntad para negociar, porque se han dado los espacios de diálogo y todo el ánimo de trabajar en conjunto, porque la educación es una gran prioridad de mi Gobierno".