Con emoción, Ricardo Hidalgo contó sus horas cerca de la muerte. (Foto: Canal 13) |
CURICÓ.-
"Cuando le di el abrazo a mi colega, le dije 'por favor, hay que ser realistas y más de alguno de los dos puede que no sobreviva. Entonces dile a mi señora a mi hijo y a mi familia que los amo mucho'. Entonces me dijo 'tranquilo no más. Tu tienes por quién más luchar'. Entonces nos dimos un abrazo, caminamos hacia el curso del río, que bajaba, para poder lanzarnos. Fue en ese momento en que llegamos a la mitad y la corriente nos llevó".
Así cuenta el carabinero Ricardo Hidalgo el momento en el que decidió abrazar a su colega Marcial Gutiérrez Flores ante la inminente muerte que se les venía encima luego de ser arrastrados por el potente caudal del río Teno, mientras realizaban labores de rescate tras los temporales.
Hoy, tras casi 24 horas de la tragedia y luego de haber sobrevivido milagrosamente luego de haber pasado más de 10 horas aferrado a un islote en las aguas de la Séptima Región, el uniformado permanece internado en el Hospital Base de Curicó.
En ese lugar, donde se recupera de los golpes y la hipotermia que casi le costaron la vida, Ricardo Hidalgo –casado con una carabinera y padre de un niño de 8 meses- contó a radio Cooperativa la tragedia que le tocó protagonizar cumpliendo con sus labores de servicio a la patria.
"Yo cuando hice mi juramento a la patria, a nuestra bandera, dije que los 365 días del año iba a cumplir mi deber, como así juré", cuenta, y acto seguido, agrega detalles de cómo sucedieron los hechos en la fría y lluviosa noche de ayer.
"Recibí un llamado que se encontraba una persona indigente debajo del puente, por lo cual nos dirigimos al lugar para sacar a la persona, que regularmente tienen problemas para caminar. Concurrimos en la RP (radiopatrullas) ingresamos hacia la parte baja del río Teno y al llegar al lugar nos dimos cuenta que el brazo ya había crecido un poco, cerca de donde estaba una fogata".
Tras esto, Hidalgo comenta que él y su compañero bajaron del radiopatrulla y caminaron hasta la fogata, donde no encontraron a ninguna persona y que posteriormente se devolvieron para verificar desde la parte superior del puente
"y en ese momento nos encontramos con que el brazo había crecido por la parte por donde ingresamos".
"Hubo un minuto de desesperación, porque como soy padre de familia, mi señora también es funcionaria de Carabineros, mi hijo tiene ocho meses y ellos son mi familia, mi razón de cada día de llegar al servicio y saber que después voy a tener mi tiempo libre y estar con ellos", dijo en su emocionado relato el funcionario policial.
Al terminar su relato de la tragedia que lo tuvo al borde de la muerte, Ricardo Hidalgo contó cuál fue la razón que lo hizo luchar para sobrevivir:
"Me encomendé a Dios y empecé a pedir al Señor por mi señora y por mi hijo". 
