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Gobierno reitera llamado a entregar voluntariamente armas de fuego

El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, sostuvo que las armas no son un elemento disuasivo, sino más bien un elemento de riesgo para la seguridad de las personas.

09 de Diciembre de 2006 | 16:30 | ORBE

SANTIAGO.- El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, señaló que hechos lamentables como la muerte de un adolescente en Estación Central producto de un disparo en la cabeza, confirman la necesidad de reiterar el llamado para que padres, madres, apoderados, adultos y jóvenes que tengan armas en su poder, las entreguen voluntariamente en unidades policiales, iglesias o capillas, y también a las autoridades fiscalizadoras de la Dirección General de Movilización Nacional.


Enfatizó que "las armas de fuego no constituyen un elemento disuasivo. Constituyen elementos de riesgo para la seguridad de los niños y para la seguridad de las personas".


Harboe precisó que según un estudio de 2004, "de cada 10 personas que tienen un arma en su casa, sólo dos de ellas alcanzan a utilizarla como elemento disuasivo o para detener un ataque. En los ocho casos restantes, o esa arma no es ubicada o es robada por los delincuentes y usada en su contra".


En este contexto, la autoridad recordó que hace algunos días el Gobierno, la Conferencia Episcopal y la Dirección de Orden y Seguridad de Carabineros, relanzó una campaña conjunta destinada precisamente a fomentar la entrega voluntaria de armas en el país.


En este sentido, el subsecretario del Interior afirmó que las campañas anteriores "han dado resultado, hemos aumentado el número de armas que la gente, voluntariamente, le está entregando a las autoridades", por lo que reiteró que "un país sin armas es un país que vive con mayores condiciones de paz y tranquilidad".


Agregó que incentivar la entrega voluntaria y anónima de armas "es una iniciativa que se enmarca en la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, uno de cuyos objetivos es la disminución en la tenencia de armas".


Cabe recordar que durante el año pasado 6.045 armas fueron devueltas, cifra que es casi el doble de las que se entregaron entre 1990 y 2004.


La autoridad finalizó señalando que para combatir con eficiencia acciones delictivas que puedan poner en riesgo nuestra vida y seguridad, "es necesario la colaboración y responsabilidad de todos, a través -por ejemplo- de acciones que contribuyan a disminuir el número de armas que circulan en nuestro país".

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