SANTIAGO.- Cerca de 200 vehículos de transporte público informales –tradicionalmente conocidos como "piratas"- han sido sancionados en lo que va de 2007. Según informó el subsecretario de Transportes, Danilo Núñez, 184 infracciones se han cursado en los casi dos meses que lleva el año, mientras 120 vehículos han sido retirados de circulación.
Sin embargo, luego del accidente que protagonizó uno de los llamados buses "pirata" en el sector de La Pirámide -que el jueves le costó la vida a cuatro personas-, quedó en evidencia que la fiscalización sobre éstos no es suficiente.
Frente a ello, la autoridad de Transportes espera que con la incorporación de los 100 nuevos fiscalizadores, que comenzarán a trabajar gradualmente a partir de este lunes, se ponga fin a los recorridos pirata que transportan pasajeros en distintos lugares de Santiago.
No obstante, el trabajo de los fiscalizadores no sólo se centrará en erradicar los buses informales, sino que además vigilarán la frecuencia de los buses y el correcto uso de la tarjeta Bip!, tal como fue anunciado por el Ministerio de Transportes antes de que ocurriera el accidente.
"La fiscalización, más allá del accidente, es permanente. De hecho nosotros tenemos un contingente de 100 fiscalizadores y ahora lo vamos a duplicar. Para esto publicamos ya la semana pasada en distintos diarios el llamado a nuevos fiscalizadores, y ya tenemos 30 más desde el día lunes, para llegar a 200 finalmente la próxima semana", explicó Núñez.
Uno de los sectores capitalinos más reconocidos por los transportes informales, es el de Escuela Militar, donde los furgones –de modelo similar a los utilizados para el transporte escolar- transitan hace años desde el paradero de Américo Vespucio hacia Huechuraba.
Durante los días de la puesta en marcha del Transantiago, estos furgones tuvieron una gran demanda en ese lugar. Carabineros mantenían el orden de los pasajeros indignados por la falta de buses, pero no daban a basto para además cursar multas a los "pirata".
"Antes del Transantiago, el sistema de transporte operaba por oferta y demanda, por lo tanto eran las empresas o los gremios de las empresas las que solicitaban recorridos y muchas zonas de Santiago quedaban desprotegidas. Así se fueron generando servicios informales en distintos lugares de la capital, que a medida que se los iba fiscalizando, aparecían por otro lado. Es una lucha constante", señaló Núñez.
La autoridad no espera que una mayor fiscalización en este sentido sea la única solución. Según Núñez, la erradicación de estos vehículos informales será efectiva una vez que los recorridos del nuevo sistema de transporte público comiencen a funcionar de manera óptima.
"Con el transcurso de los días y en la medida que se ha ido constituyendo, fortaleciendo y robusteciendo Transantiago, ya las frecuencias se empiezan a dar, los recorridos que no estaban en los primeros días se están entregando y entre éstos está el 305, que pertenece a una de las empresas que nosotros multamos, porque no daba la frecuencia correspondiente", dijo el subsecretario de Transportes.
Núñez explicó además que "en La Pirámide, efectivamente, no existía recorrido que uniera Huechuraba con Escuela Militar, esto provocó que la gente se dirigieran hacia el centro, después combinara hacia la zona oriente, y así proliferaron los 'pirata'".
"Cuando generamos el nuevo plano del Transantiago se colocó el bus troncal 305, que es primera vez que la locomoción colectiva cubre esa zona, desde Quilicura, pasando por Huechuraba, hasta La Pirámide y llega hasta Vitacura. Con Transantiago ya es distinto, porque fijamos una malla de recorrido. Se licitó, por lo tanto se adjudicó a la troncal determinado y ellos deben tener un servicio que pase por ahí con una frecuencia determinada por hora", añadió.
Asimismo, Núñez llamó a los usuarios a terminar con el uso de estos transportes que por su ilegalidad, no cuentan con los seguros necesarios en caso de accidente y mucho menos en caso de que algún pasajero fallezca, tal como sucedió el jueves.
"Lamentamos el accidente, pero nosotros siempre lo dijimos, no hay que usar buses "pirata", ya que uno no sabe si los conductores y los vehículos cumplen con las condiciones requeridas para este tipo de transporte. La gente se expone, porque no hay seguros de por medio, en el caso de muertes o accidente de gravedad para solventarlos económicamente", señaló al respecto.
Falta de fiscalización
A pesar de que el Gobierno confía en que la implementación del Transantiago terminará con los recorridos de buses "pirata", para el presidente de la UDI, Hernán Larraín, es necesario ser más riguroso con la fiscalización.
"La falta de fiscalización refleja la debilidad con que se está trabajando en este ámbito y la falta de imaginación para los recorridos. Porque hay recorridos informales que surgen y probablemente el fracaso que ha tenido el Transantiago pueda originar, en aquellos lugares en donde no se está atendiendo debidamente a la gente por el transporte público, la operación de recorridos informales que van a llenar el vacío que deja la incompetencia del Gobierno", enfatizó el líder gremialista.
Asimismo, Larraín señaló que mientras no se mejore el nuevo sistema de transporte público, no podrá ponerse fin a los buses "pirata".
"Falta diseñar recorridos adecuados a la gente, porque aquí se juntan las dos cosas. Porque una línea pirata surge porque no está cubierto un recorrido que tiene mucha demanda y eso es parte del diseño del sistema de transporte", dijo el líder de la Alianza.
Según el presidente de la UDI, "si la gente los termina utilizando es porque no tiene alternativas de transporte. Debe haber un poquito de sensibilidad para diseñar los recorridos donde sea necesario y eso es en lo que está fallando también la fiscalización de transportes metropolitana".
Durante el año pasado se cursó un total de 3.896 infracciones y se retiró un total de 1.961 vehículos por transporte informal .