El hecho se produjo ayer en el denominado "camino de los siete lagos", situado al sur del país trasandino, cuando los 21 pasajeros del vehículo turístico arribaron al mirador del Lago Espejo y algunos descendieron, entre ellos el conductor, para contemplar el paisaje.
Instantes después, el bus comenzó a descender por el barranco hasta caer al lago, lo que produjo que cuatro de los pasajeros murieran y otros 16 resultaran heridos, ocho de ellos de gravedad.
Un grupo de peritos analiza hoy las causas del accidente, aunque algunas versiones señalan que el conductor olvidó activar el freno de mano cuando descendió del vehículo.
Dos de los heridos fueron trasladados a un hospital de la ciudad de Bariloche, mientras que el resto fue llevado a un centro asistencial cercano.
Las víctimas pertenecían a la provincia argentina de Santa Fe y viajaban hacia San Martín de los Andes, procedentes de Puerto Montt.