Joven curicana ha vivido un año con trozo de bisturí en sus encías

CURICÓ.- Con parte de un bisturí alojado en una de sus encías vive Jennifer Jáuregui Bravo (22 años), desde marzo de 2006, cuando se sometió a una cirugía para la extracción de una muela en el hospital de esta ciudad.

Tras intensos dolores e infecciones sin explicación, la paciente logró enterarse sólo 8 meses después, mediante una radiografía, que el cirujano tratante olvidó un trozo del instrumento quirúrgico en su boca.

“Hoja de bisturí entre piezas dentales 31 y 32’’, indica el examen realizado el 10 de noviembre de 2006 en la Clínica Alemana de Santiago.

El lunes pasado, el Consejo de Defensa del Estado (CDE) dio por finalizada la mediación entre el Servicio de Salud del Maule (SSM) y la afectada, sin lograrse acuerdos indemnizatorios entre las partes.

Jennifer Jáuregui, que ahora con siete meses de embarazo, denuncia que el cirujano maxilofacial Carlos Aguiar. Este no ha reconocido el error médico. La mujer lamenta el incidente que la obligó a ingerir antibióticos y someterse a exámenes de rayos X, todo lo cual podría dañar la gestación de su hijo. “Exijo justicia. Aparte del dolor, lo grave es el miedo a que mi hijo sufra consecuencias por el tratamiento”, afirmó la joven madre.

Según el abogado de la víctima, Raúl Leiva, el cirujano incurrió en una negligencia médica y cuasidelito facultativo, contemplado en el artículo 491 del Código Penal.

La paciente, quien aún tiene el elemento cortante en su boca, prepara acciones civiles contra el fisco, por casi 100 millones de pesos, y una querella contra el médico tratante.