SANTIAGO.- El presidente de la Cámara de Diputados, Patricio Walker (DC), visitó las dependencias del antiguo Congreso Nacional en Santiago para supervisar los avances de remodelación de las oficinas que a partir de marzo del próximo año ocupará la corporación en Santiago, aclarando que no se trata de un traslado del Parlamento a la capital.
Walker explicó que "en marzo debemos entregar las actuales dependencias que ocupa la Cámara de Diputados en Santiago en el palacio Ariztía, probablemente, al Tribunal Constitucional; por eso, esperamos que el dos de marzo se encuentre lista la primera etapa; después que la Cancillería abandonó el edificio, el Senado ya se instaló realizando los trabajos respectivos, ahora, le corresponde a la Cámara".
Según se informó, los pisos superiores estarían ocupados por la Presidencia y, como aseveró el titular de la Cámara, "en el primer piso comenzarían a funcionar los diversos comités y las comisiones que excepcionalmente sesionan en Santiago".
Walker aclaró que "nadie puede pensar que estamos trasladando el Congreso desde Valparaíso a Santiago".
Walker señaló que la idea es que las salas del edificio, que tienen valor histórico, también sean remodeladas previamente a la segunda etapa de acondicionamiento, que estaría lista para abril, incluyendo el mejoramiento de las dependencias del segundo piso o entrepiso, donde funcionará la secretaría.
El presidente de la Cámara sostuvo que "el costo de la obra es de mil ochocientos treinta y nueve millones de pesos, y representa un tercio de lo que hubiera costado construir un edificio nuevo, sin contar el rescate de un valor simbólico tremendo, pues cabe recordar que aquí funcionó la Cámara de Diputados hasta el año 73".