Canciller peruano confirma invitación a Bachelet para que visite Lima

ROMA/SANTIAGO.- El gobierno de Alan García reiteró su interés en que la Presidenta chilena, Michelle Bachelet, visite Lima antes de fin de año, según confirmó el canciller peruano José Antonio García Belaúnde.

En declaraciones a periodistas chilenos en Roma, el canciller avaló la versión que publicó este martes El Mercurio.

"Si nosotros hemos hecho una invitación es porque esperamos que vaya", señaló el ministro peruano, quien participó en un encuentro entre Italia y América Latina.

El canciller Alejandro Foxley, quien acompaña a la Presidenta Bachelet en una visita oficial a Roma, señaló que "hay una invitación a un encuentro empresarial en Lima a fines de noviembre".

"Ella todavía no ha contestado simplemente por problemas de agenda. Está viendo si acaso puede acomodar el tiempo para hacer esa visita", agregó.

En caso de que finalmente se concrete la visita, "el Presidente Alan García también ha manifestado que le gustaría verse con la Presidenta, conversar y seguir discutiendo los temas de interés común", explicó el canciller Foxley.

En todo caso, si Bachelet desiste del viaje, no significaría ninguna señal negativa, añadió Foxley.

"Los Presidentes todos tienen agendas en sus países enormemente intensas y viajan sólo cuando pueden hacerlo y eso no significa ninguna señal ni positiva ni negativa respecto de una invitación específica", afirmó.

En su edición de este martes, El Mercurio afirmó que Lima busca acelerar la visita de Bachelet a Perú para que sea antes de la presentación peruana ante la Corte Internacional de La Haya por un reclamo marítimo, que se realizaría en noviembre.

"Hay una diferente interpretación sobre instrumentos, eso es todo. La diferente interpretación la vamos a solucionar como dos países hermanos, civilizados y maduros solucionan las cosas, mediante la intervención de un mecanismo que en este caso es La Haya", explicó Belaúnde.

Perú afirma que los límites marítimos entre ambos países no están fijados, pero Chile sostiene que quedaron sellados en dos acuerdos de 1952 y 1954.