SANTIAGO.- Chile no seguirá adelante con la polémica desatada a raíz del impasse protagonizado por el Presidente de Venezuela y el Rey de España durante la XVII Cumbre Iberoamericana, luego que expresara una abierta postura a favor del país europeo, cuyo ex Presidente José María Aznar fue tildado de "fascista" por Hugo Chávez.
Así lo recalcó el canciller Alejandro Foxley, principal blanco de las críticas del gobierno venezolano por opinar que Chile tiene con España "un grado más alto de alianza" que con Venezuela y que "se puede discrepar todo lo que se quiera en una cumbre pero sin descalificar a las personas".
"Nosotros damos por superado todo aquello relacionado con los incidentes que hubo en la Cumbre y ahora simplemente lo que estamos mirando es la agenda concreta para llevar adelante lo que fueron los acuerdos de la Cumbre y en eso vamos a estar muy activos", aseguró el jefe de la diplomacia chilena.
Foxley dio por terminado este tema luego que hoy el vicecanciller venezolano, Rodolfo Sanz, lo instara a mantener "la sensatez" en pos de "un diálogo de altura entre nuestras representaciones diplomáticas".
Al respecto, el ministro de Relaciones Exteriores sólo declaró que "todo el mundo me ha dicho siempre que soy una persona muy mesurada… Así que no tengo mucho que comentar sobre eso".
Reunión de Bachelet con Lula y Morales
El canciller puso punto final a este episodio luego de reunirse por más de dos horas con la Presidenta Michelle Bachelet y un grupo de diputados bolivianos en La Moneda.
En la ocasión, el ministro informó que la Mandataria chilena y sus pares de Brasil y Bolivia se reunirán próximamente -en una fecha y lugar a definir- para concretar la realización de un corredor bioceánico que permita la integración de los habitantes de las tres naciones.
"Lo que quieren hacer los tres Presidentes es reunirse en algún lugar que van a determinar, probablemente en Bolivia, para anunciar un calendario de realización y finalización de ese corredor bioceánico y que pueda ser inaugurado en un plazo razonablemente breve", explicó Foxley.
El asunto fue abordado por la Presidenta Bachelet con el Jefe de Estado brasileño, Lula da Silva, y el Gobernante boliviano, Evo Morales, durante la Cumbre Iberoamericana realizada en Santiago la semana pasada.
Aunque el diputado radical Carlos Abel Jarpa -presente en la cita de hoy en el palacio de Gobierno- dijo que el encuentro será en diciembre, el canciller afirmó que "la fecha se tiene que afinar porque hay mucho viaje, vamos a estar todos en Argentina para la transmisión de mando" que será en la segunda semana de ese mes.
"Pero el Presidente Lula entiendo que probablemente pase por Bolivia en esa fecha y nosotros tenemos varias visitas en Chile alrededor de esa fecha. Entonces estamos en este momento simplemente tratando de coordinar las agendas de los tres, pero es interesante, importante, que los tres Presidentes puedan finalmente dar el puntapié inicial a lo que creo que es una magnífica iniciativa", agregó Foxley.