PUERTO MONTT.- En un punto muerto siguen las conversaciones entre la empresa salmonera Aguas Claras y el sindicato de trabajadores, que no pudieron concretar un acuerdo pese a la disposición del Arzobispo de Puerto Montt, Monseñor Cristian Caro, quien luego de intentar acercar a las partes, anunciara hoy oficialmente que luego de "hacer todo lo posible", "no corresponde que la Iglesia asuma la función de garante".
Caro había conversado con las dos partes, en un intento por mediar en el conflicto; sin embargo, no se concretó una conversación porque las éstas no llegaron a un acuerdo para los términos y condiciones en que se iba a dar el diálogo.
Aparentemente la empresa habría condicionado su participación en una mesa a la marginación de algunos de los dirigentes, pero monseñor Caro no entregó detalles de las razones más que lo expresado en un escueto comunicado, donde aseveró que hizo el intento "pensando en el bien común y la paz social".
El prelado estimó que ahora "ambas partes deben sentarse a la mesa para negociar y llegar a un acuerdo".
En este sentido, invitó -en tiempo de cuaresma- a todos los fieles a orar por una solución pacífica del conflicto, "cuya prolongación daña a todos".