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Este domingo serán los funerales de la madre y su pequeña hija de la tragedia de Peñalolén

A las 11:00 horas en el Cementerio Sacramental de San Bernardo se realizará el último adiós de Ana Álvarez y Elisabeth Molina.

01 de Marzo de 2008 | 09:30 | El Mercurio Online

SANTIAGO.- Este domingo, a las 11:00 horas en el Cementerio Sacramental de San Bernardo, se realizarán los funerales de Ana Álvarez, de 26 años, y su pequeña hija, Elisabeth Molina, de cuatro, quienes fallecieron en la tragedia de la comuna Peñalolén, el pasado miércoles.

Debido a las graves quemaduras que sufrió Ana dificultaron su identificación lo que provocó que el Servicio Médico Legal atrasara en un día la entrega de su cuerpo.

La familia de la malograda mujer y su hija, que se encontraban realizando ejercicios físicos en el lugar donde capotó la avioneta, decidió recibir ambos cuerpos y retirarlos durante la tarde de este viernes y realizar sus funerales este domingo a las 11:00 horas en el Cementerio Sacramental de San Bernardo.

Una vez retirado los cuerpos los familiares se trasladaron a San Bernardo para realizar el velatorio. El padre de la menor, Luis Molina recordó las horas previas a la tragedia del pasado miércoles.

"Nos quedamos regaloneando en la cama a mi niña, incluso llegamos atrasado a las clases de gimnasia. Por eso cuando me retiraba vi todo lo que pasó, el avión cayó muy cerca mío".

Según Molina "la avioneta venía con una pequeña llama, la cual produjo la explosión inmediata y provocó esta tragedia tremenda. Entre al lugar desesperadamente a mi pareja y mi hijita, y las encontré en otro lugar. Traté de apagar su cuerpos pero ya era muy tarde".

Luis Molina también tuvo palabras sobre los proyectos que tenía junto a su familia. "Habían muchas cosas que queríamos realizar, pero lamentablemente todo quedó truncado, pero igual voy a terminar de construir lo que ella quiso, lo más que se pueda".


Agregó que "habíamos logrado un subsidio para mejorar nuestra casa, Ana tenía mucho proyectos relacionado con sus estudios de parvulario. Ella estaba en tercer año y tenía listo un crédito para continuar tranquilamente su carrera. Era muy esforzada, pero debo ser fuerte y cuando pase todo esto habrá tiempo para llorar".