VALPARAÍSO.- El gigantesco incendio forestal que, desde el domingo pasado, afecta a las zonas aledañas a Valparaíso, ya ha consumido 2.600 hectáreas de pastizales, matorrales y arbolado de pino y de eucaliptus, según el último informe entregado por las autoridades.
Luego de que fuera controlado su avance hacia los sectores poblados de Curauma y Peñuelas, actualmente los esfuerzos se concentran en detener su propagación hacia la zona de Laguna Verde, por lo que a partir de hoy trabajan intensamente 14 brigadas de Conaf.
Dicho frente aún no había sido atacado pues la acción de Bomberos y brigadistas se había enfocado proteger las zonas pobladas, para lo que se construyeron 4 kilómetros de cortafuego.
Por el momento se mantiene la alerta roja en la zona y no se han registrado problemas de intoxicación por inhalación del humo, que se está disipando. Mientras que las clases, que se habían suspendido momentáneamente, se retomaron.
En tanto, hoy el gobernador provincial, Ricardo Bravo, presentará una denuncia ante la Fiscalía Regional con el fin de que se investigue la posible provocación intencional del incendio.