Imputado por violación planificaba cuidadosamente sus ataques sexuales

SANTIAGO.- Como un delincuente sexual de "tipo organizado" fue calificado por Carabineros Francisco Javier Azúa Cubillos, de 20 años, quien fue detenido luego de que atacara a una mujer en la esquina de Cerro Colorado con Tupungato, en Las Condes, la tarde del miércoles.

Esta definición realizada por la policía se debe a que el sujeto actuaba sólo en un sector, asociado a su lugar de trabajo o a su domicilio, eligiendo a la víctima de acuerdo a ciertas características y a una hora definida.

Respecto del perfil de víctimas, el mayor Mauricio Valdivia, jefe de análisis criminal del departamento OS-9 de Carabineros, dijo que se trata de mujeres vulnerables físicamente, sobre las cuales podía ejercer cierto poder, por lo que al momento del ataque las humillaba y siempre esperaba una respuesta agresiva de parte de ellas.

En este contexto, Valdivia descartó que el violador pueda ser calificado como un psicópata, debido a que una persona con esas características "va a violar o estafar, o incluso, matar".

En cambio, en el caso de Azúa su objetivo es encontrar el placer sexual a través de los ataques, debido a una incapacidad para entablar una relación amorosa madura. En otras palabras, no tiene capacidad de seducción, a lo que se suma un complejo de inferioridad.

De acuerdo con Valdivia, esa alteración sexual se pudo haber producido al haber enfrentado una "situación crítica" de tipo familiar o directamente con sus padres.

Según el jefe policial Azúa es un hombre tímido y retraído en su vida habitual, debido a su sensación de inferioridad que presenta.

Sonrisa

El jefe de análisis criminal se refirió también a la sonrisa que esbozó el imputado al momento de enfrentar las cámaras cuando era trasladado desde la 47 Comisaría de Los Dominicos hasta el Centro de Justicia.

De acuerdo con el especialista, eso se debió a que a pesar de sentirse inferior, la atención que concita le entrega un espacio en la sociedad.

Al ser consultado sobre si toda esta descripción sicológica ameritaba que el sujeto fuera declarado no imputable, Valdivia enfatizó que esta posibilidad está completamente descartada porque Azúa está conciente de lo que hizo.