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Comisión de la Corte de Apelaciones detecta diferencias notables en cárceles de Santiago

Los magistrados constataron que en la antigua Penitenciaría "las carencias son indignantes, no se proporciona seguridad personal a los reclusos y muchos de ellos prefieren vivir en condiciones subhumanas por temor a ser agredidos".

04 de Julio de 2008 | 17:51 | El Mercurio Online

SANTIAGO.- Diferencias notables en las condiciones de los penales de la Región Metropolitana detectó la visita semestral a los establecimientos penales realizada por la comisión de la Corte de Apelaciones de Santiago, el 26 de junio pasado.


La comisión -encabezada por el presidente del tribunal de alzada, Haroldo Brito, e integrada por la ministra Jessica González, la jueza oral Karina Ormeño, la jueza de garantía Paulina Gallardo y la secretaría subrogante de la Corte de Apelaciones de Santiago Marcela Salazar- visitó el Centro de Detención Preventiva Santiago Sur (Ex Penitenciaría), el Centro de Detención Santiago 1, el Centro Penitenciario Femenino y el Centro de Internación Provisoria y CRC mixto de Santiago.


Los magistrados constataron que en la antigua Penitenciaría "las carencias son indignantes, no se proporciona seguridad personal a los reclusos y muchos de ellos prefieren vivir en condiciones subhumanas por temor a ser agredidos por otros internos".


Añaden que el lugar no cuenta con celdas adecuadas, baños ni ropa de cama, los internos son mantenidos en condiciones de indignidad, y la situación contribuye al estado de violencia que se advierte en el recinto.


A juicio de la comisión, las posibilidades de trabajo son mínimas, y escasamente remuneradas.


En tanto, en la cárcel de mujeres la situación "no alcanza el nivel gravedad de los varones, pero es claramente deficitaria". Sin embargo, sostienen que la oferta de trabajo es insuficiente y se cuenta con un programa de rehabilitación de drogadictas de muy escaso impacto, aunque muy bien orientado.


Señalan asimismo que el Centro Penitenciario Santiago I impresiona positivamente, ya que se nota seguridad y buenas condiciones generales. Pese a ello, advierten que la población alcanzó su número máximo y "se requiere mantener especial preocupación para conservar el proyecto inicial".


Al momento de la visita se detectó una población de 3.019 imputados, siendo la capacidad máxima para ese penal de 3.081 internos. Si este total es superado se debe cancelar una multa por sobrepoblamiento.

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