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Presidente de Subus: "Ponerle una lápida al Transantiago no tiene mayor significación"

Héctor Moya declaró que la falla "gravísima" del sistema de locomoción radica en que la gestión de flota -la que regula la frecuencia de los buses- no está funcionando.

05 de Septiembre de 2008 | 08:51 | El Mercurio Online

SANTIAGO.- El presidente de Subus- uno de los operadores del Transantiago, Héctor Moya, declaró que la idea de “borrón y cuenta nueva” para el sistema de locomoción, no es la mejor propuesta, ya que éste moviliza a seis millones de personas al día y “nadie puede parar el transporte”.


“Por lo tanto esto de ponerle una lápida o enterrar el Transantiago no tiene mayor significación”, aseguró Moya a radio Cooperativa.


Independiente al anuncio que hizo ayer la Presidenta de que se usará el 2% Constitucional para mantener en marcha el sistema, el presidente de Subus, sostuvo que el Transantiago debería tener tres prioridades para mejorar su gestión.


Primero, se le debe solucionar el problema de los transbordos, ya que “esa es la gran molestia que tienen los usuarios. Hay que disminuirlos”, dijo Moya.


Lo segundo, según el presidente de Subus, se requiere generar la infraestructura necesaria para que los transbordos se hagan de forma rápida y cómoda para las personas, además de implementar los corredores segregados que dan velociddad.


Lo tercero que se debe mejorar y que según Moya, ha significado una “falla gravísima”, es la gestión de flota, que es la encargada de regular la frecuencia de los buses.


“Llevamos un año y medio y todavía no contamos con ello (...). Los buses están en la calle, pero no pasan regularmente por los paraderos y eso hace que la gente espere una hora”, explicó el presidente de Subus.


Sobre las críticas que ha recibido el sistema, respecto a que no cumplió con lo prometido, Moya aclaró que: “Nunca se prometió buses nuevos, nunca se prometió que las personas iban a andar sentadas, eso es imposible, ya que se requerirían 24 mil buses”.


En este contexto, el presidente de Subus recalcó que lo único que se prometió fueron dos troncales con buses nuevos, el 2 y el 4, pero el resto del sistema iba a seguir con los viejos porque muchos pequeños empresarios vivían de esos buses (...) a ellos se les dio cinco años para renovarlos y llevamos tres”, aclaró Moya.


Ante el pesimista escenario que ha planteado la oposición respecto al Transantiago, Moya sostuvo que éste se debe a que el tema se politizó.


“El país está en elecciones y por lo tanto se exagera y se dicen cosas que son falsas. Por ejemplo, decir que los trabajadores se encuentran más mal que antes, por favor, eso es una exageración”, aseguró Moya.


En este contexto, invitó a los presidentes de la Alianza, Juan Antonio Coloma y Carlos Larraín a que visiten su empresa y que “después hagan las declaraciones”, dijo Moya.

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