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"Zakarach" reveló que se intentó suicidar tres veces en Brasil

Primero consumió 110 pastillas tranquilizantes, luego trató de provocarse una embolia inyectándose aire en las venas, para finalmente colgarse en la ducha de una delegación policial

28 de Octubre de 2008 | 16:44 | El Mercurio Online
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Tras un exitoso proceso de extradición desde Brasil, Maureira se encuentra recluido en Chile en la Cárcel de Alta Seguridad.

José Alvújar, El Mercurio

SANTIAGO.- Pese a que estaba sometido a fuertes medidas de seguridad durante su reclusión en Brasil, el pedófilo Rafael Maureira Trujillo, alias "Zakarach", reveló en una entrevista con una revista digital chilena que intentó quitarse la vida en tres oportunidades.


Según informa la revista "Defensores.cl", la entrevista se llevó a cabo gracias a que el detenido tuvo acceso a un cuestionario enviado desde Chile para dilucidar las condiciones en las que se desarrollaba su cautiverio.


Maureira, quien luego de un exitoso proceso de extradición se encuentra recluido en Chile en la Cárcel de Alta Seguridad, reveló a esa publicación que "cuando me detuvieron, mi pesadilla terminó", frase que sirvió de título para el texto que entrega detalles de los planes de "Zakarach" para terminar con su vida.


Desde su celda en Brasil, Maureira dijo que "el pánico irracional y el delirio de persecución que tenía eran insoportables", y a reglón seguido afirmó:"Intenté en tres ocasiones suicidarme".


Dejando en claro que la idea de quitarse la vida llevaba en su mente varios meses, "Zakarach" dijo que en su primer intento "ingerí más de 60 ravotril diluidos", los que según indicó "distribuí en seis vasos y a eso le sumé 50 píldoras para el corazón, diluidas en agua también".


Según confidenció, con esta solución "pensé que así me daría un ataque cardíaco fulminante. Finalmente, no pasó nada, sólo anduve dopado como dos semanas".


En la segunda oportunidad en la que Maureira Trujillo quiso suicidarse eligió un método más abreviado. "intenté inyectarme aire en las venas con una jeringa", plan que a todas luces, tampoco le resultó.


Su objetivo era  producirse "una embolia cerebral". Al respecto, afirmó que "no logré hacerlo. Y la última vez, en la delegación de la Policía Federal, en Florianópolis, intenté ahorcarme con el cordón de mis bermudas. Lo amarré a la ducha y a mi cuello, pero se cayó la ducha".


"Quiero rehacer mi vida"


En el desarrollo de la entrevista, Maureira indicó que una vez que cumpla su condena de 20 años por abuso sexual de menores y reproducción de material pornográfico infantil, pretende volver a Brasil y "trabajar de forma independiente en el rubro de la panadería y repostería. Quiero rehacer mi vida".


Sin embargo, admitió que para él "no es fácil decir que estoy arrepentido por mis errores del pasado" y agregó que "uno tiene que sentirlo en el corazón, perdonarse a sí mismo y sentir que la ciudadanía lo puede perdonar también".


A reglón seguido, Maureira Trujillo señala que "sí estoy un poco arrepentido, y siento que cada día comprendo más todo el daño que hice, no tan sólo a menores, sino que también a mi familia".

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