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En prisión preventiva detenidos con LSD en pleno centro de Santiago

El operativo derivó en el mayor comiso de LSD en lo que va de la reforma Procesal Penal, tras la incautación de 890 dosis de la peligrosa droga.

18 de Noviembre de 2008 | 13:33 | Francisco Águila, El Mercurio Online

SANTIAGO.- En prisión preventiva quedó la pareja que fue detenida anoche por personal de la Brigada contra el Crimen Organizado de la PDI, tras sorprenderlos vendiendo LSD en la Plaza de Armas, delito que fue detectado gracias a una denuncia anónima.


La decisión fue tomada por la jueza de garantía Mercedes Ortega, quien prohibió emitir los nombres y las imágenes de los imputados, a petición de la defensora Lissette Rodríguez.


Los imputados R.C.G.T. (30) y R.S.V.B. (24) fueron formalizados por el delito de tráfico ilícito de estupefacientes por parte del fiscal antidrogas de la zona Centro-Norte, Nicolás Arrieta.


En la audiencia, Arrieta señaló que el operativo policial se inició tras un llamado anónimo que alertaba acerca de la existencia de dos personas vendiendo droga en plena Plaza de Armas, tras lo cual personal policial se dirigió al lugar y uno de ellos pasó junto a los acusados, momentos en que le ofrecieron la droga, originándose la detención.


Previo a la audiencia de formalización la imputada R.S.V.B. tuvo una crisis de pánico, lo que provocó la suspensión momentánea de la diligencia.


Una vez que los imputados fueron detenidos, se incautaron 890 dosis de la peligrosa, lo que está avaluado en más de 20 millones de pesos, la que provenía de Alemania. Arrieta, por su parte, sostuvo que éste es el mayor comiso de LSD en lo que va de la reforma Procesal Penal, recordando que la última incautación se produjo a comienzos de la década cuando la policía recuperó 867 dosis.


En tanto, la defensora Lissette Rodríguez, sostuvo que la imputada no tendría nada que ver con el hecho ya que sólo estaba conversando con el otro imputado en momentos en que éste fue detenido por la PDI.


A pesar de la anterior, la jueza Ortega acogió la petición del fiscal Arrieta, aduciendo que la libertad de ambos es un peligro para la sociedad.


Ambos imputados arriesgan hasta 15 años de cárcel y debieran estar al menor 90 días en prisión preventiva, mientras se realiza la investigación.