SANTIAGO.- Aunque la intención de Fredy Maureira (46), -de querer entregarle a la cantante Madonna, su hija Valentina (8), quien padece fibrosis quística- es una decisión drástica para salvarle la vida, según el director del Servicio Nacional de Menores (Sename), Eugenio San Martín, legalmente, dicha determinación no puede ser efectiva.
“La adopción no es una manera para resolver los problemas de financiamiento de enfermedades. No existe para eso”, sentenció el director.
San Martín explicó que la adopción es una herramienta que permite que los niños puedan vivir en familia, lo que se materializa en los niños que no tienen padres, han sido abandonados o que no asumen sus responsabilidades, lo que se aleja mucho de la realidad de Valentina.
“En este caso, evidentemente, no es que los padres no estén en condiciones de criar a esa hija, lo que ellos tienen es otro problema, y no se soluciona entregándosela a otra persona”, reiteró el director del Sename.
Lo que permite la legislación chilena es que los padres pueden ceder voluntariamente en adopción a sus hijos hombres mayores de 14 años y a las mujeres, mayores de 12, siempre y cuando los menores acepten, pero eso no implica que se lo vayan a dar a las personas que ellos elijan.
“En Chile, la adopción no es una transacción y tampoco una entrega directa de un niño (...). Es un procedimiento que está regulado por la ley, en que interviene el Tribunal de Familia y otras instituciones”, precisó San Martín.
Lo que hacen los padres que quieren entregarlo, es cederlo voluntariamente y el Tribunal de Familia determinará qué familia lo puede adoptar.
“Cuando un padre quiere ceder a su hijo, no se lo hace a una persona determinada, simplemente declara que lo entrega voluntariamente, para que el tribunal lo de en adopción”, recalcó el director.
Además explicó que una vez que eso ocurre, el tribunal debe declara la susceptibilidad del niño para ser adoptado y sin eso ocurre, verá si hay padres disponibles e idóneos, para hacerse cargo.