SANTIAGO.- El subsecretario del Interior, Felipe Harboe, se refirió al ataque del que fue objeto el juez Ignacio Adana, de Villa Alemana, quien ayer fue encañonado y amenazado de muerte por encapuchados mientras se dirigía al tribunal.
Al respecto, sostuvo que "este país no puede sucumbir ante las amenazas de algunas personas, aquellas personas que ejercemos la función pública recibimos constantes amenazas. Nosotros no vamos a amilanar por este tipo de amenazas. Aquellos que ejercemos y tenemos vocación de servicio público vamos a seguir trabajando".
En cuanto a los casos de amedrentamientos a autoridades por parte de delincuentes, Harboe indicó que "esto es recurrente, pero tanto los jueces que tienen una misión muy difícil en nuestro país, como los fiscales, como aquellos que trabajamos en materia de seguridad, Carabineros, Investigaciones, funcionarios de Gobierno, recibimos constantes amenazas".
"Eso nos da más fuerza para seguir adelante, perseguir a estos delincuentes y decirles de cara que los vamos a perseguir y los vamos a pillar", afirmó el subsecretario, de visita en la Región de La Araucanía.
A las 7.00 horas de ayer, el magistrado, conocido como "el juez de hierro" por aplicar el máximo rigor en las medidas cautelares solicitadas por el Ministerio Público, se dirigía al tribunal cuando un taxi negro sin placas se ubicó al lado de su automóvil obligándolo a detenerse en la berma.
Luego dos sujetos con pasamontañas lo encañonaron con escopetas a menos de 10 centímetros de su rostro y le advirtieron que "dejara de sapear", que conocían a su familia y dónde vivía, por lo que se debía andar "con cuidado" pues su vida y la de su familia corrían peligro.