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Niños con enfermedades de alto riesgo hacen realidad sus sueños

Los más emocionados eran sus padres, quienes son los únicos que conocen desde cerca, lo que significa cumplir el anehelo de sus hijos.

17 de Diciembre de 2008 | 16:39 | Renata Robbio, El Mercurio Online

SANTIAGO.- Esperanza y optimismo fueron parte de los “regalos” que un grupo de siete niños, apadrinados por la fundación “Make a Wish”, recibieron esta mañana, en el hotel Sheraton, donde celebraron una Navidad “adelantada”, en compañía de sus padres. ¿El objetivo? Cumplir alguno de los sueños de los pequeños, quienes en su mayoría, padecen enfermedades de alto riesgo.


J.S (7) y C.J (15) fueron dos de los niños que pudieron cumplir su deseo. El primero, recibió toda la colección Lego de la serie Star Wars, quien además tuvo la oportunidad de compartir con los personajes de la saga; mientras que C.J , en compañía del animador y cantante, Lucho Jara, obtuvo una beca para aprender canto en la academia del conductor de televisión.


Entre globos, aplausos y cara de incredulidad de los niños, quienes no dejaban de reír, comer galletas y disfrutar sus regalos; los más emocionados eran sus padres, quienes son los únicos que conocen qué tan importante es para ellos y sus hijos, que sus sueños se hagan realidad.


“Era algo que no podíamos darle, eso a nosotros nos tiene muy emocionados porque queremos que alcance a cumplir todos sus sueños”, cuenta con lágrimas en los ojos, la madre de J.S, Jessica Jara, quien además detalla la difícil enfermedad que aqueja a su hijo, desde hace ocho meses.


“Él tiene leucemia. No hay esperanzan para él, la única solución era un trasplante de médula, pero ninguno de sus hermanos salió compatible”, comenta Jessica, mientras llama la atención que su hijo revolotea y juega como si estuviera sano, de hecho, a simple vista, pareciera que no tiene nada.


“Él se ve normal porque el tratamiento que recibe es en base a una droga, que según los médicos, no es para mejorar la enfermedad, sino para que sus síntomas no aparezcan, pero la enfermedad sigue avanzando”, explica la madre de J.S.


“La única posibilidad o esperanza que tenemos es un trasplante de médula que queremos hacerle en Estados Unidos, pero eso cuesta $40 millones y económicamente nosotros no podemos y lo peor de todo es que no podemos hacer nada más”, dijo Jessica, quien no logra contener el llanto.


“Ella no se va a morir, estamos luchando por eso”


La historia de C.J no es muy diferente a la de J.S. A sus 14 años, el 27 de abril de este año, le diagnosticaron cáncer a los huesos, y desde entonces no ha dejado de luchar contra su enfermedad, y tampoco de cantar. ¿Su sueño? Ser cantante. Hoy, gracias a la fundación Make a Wish y Lucho Jara, podrá hacerlo realidad.


“Estoy muy emocionada, no sospechaba nada, no sé cantar, pero por eso quiero aprender. Toda mi vida he querido ser cantante”, dice C.J.


Su madre, Verónica Rubilar, cuenta que cuando le dijeron la palabra “cáncer”, se quería morir, pero junto a su marido y sus otros seis hijos “no nos derrotamos y hemos enfrentado este proceso con bastante fe y esperanza”.


C.J. todavía está con quimioterapias y debe seguir con este tratamiento hasta mayo del próximo año, cuando deberán hacerle nuevos exámenes, para ver si la enfermedad se le ramificó en alguna otra parte del cuerpo.


Pero eso no ha sido lo más difícil para C.J., su madre dice que lo que más le ha costado a su hija es asumir la caída de su pelo, “costó mucho que usara pañuelo, ella antes se ponía un gorrito, pero con el calor tuvo que sacárselo”.


“Todos hemos estado muy unidos, cuando supe el diagnóstico, yo dije: ‘No, ella no se va a morir, ella va a salir adelante y estamos luchando en eso”, asegura Verónica.

La fundación “Make a Wish” trabaja en 34 países de los cinco continentes y apadrina a niños entre 3 y 18 años, con enfermedades de alto riesgo, a quienes les intentan cumplir sus sueños durante todo el año y no sólo en Navidad.

A nivel mundial, el trabajo de sus voluntarios y la cooperación de diversas empresas, han permitido que actualmente se cumpla un deseo cada 31 minutos.

Durante 2007 algunos de los sueños que se hicieron realidad en Chile fueron conocer al dinosaurio Barney, estar con Sergio Lagos, ir al recital de Cold Play, tener una piscina, estar con la Oreja de Van Gogh, ir a la nieve, estar con muchos animales y subirse a un auto Fórmula Uno.

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