Corte eleva a presidio perpetuo condena contra "Zakarach"

SANTIAGO.- La Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago elevó a presidio perpetuo la condena de 20 años de cárcel dictada en primera instancia contra Rafael Maureira Trujillo, alias "Zakarach", por violación y abuso sexual reiterado a menores, además del delito de asociación ilícita.

El tribunal de alzada consideró en forma unánime que por el primer delito "Zakarach" cumpla una condena de 20 años, mientras que por la asociación ilícita se estableció una pena de 15 años.

También se elevaron las sanciones a los otros líderes de la red Paidos, Juan Carlos Ávalos y Daniel González Castro, a cadena perpetua calificada por violación, más 15 años por asociación ilícita, lo que significa que sólo después de 40 años de cárcel pueden optar a beneficios carcelarios.

En el caso de "Zakarach" la sentencia de presidio perpetuo simple implica que sólo después de cumplir 20 años de cárcel puede acceder a dichos beneficios.

A los demás integrantes de la red se les mantuvieron las condenas de primera instancia que fluctúan entre los 3 años y los 100 días. Sólo a uno se le concedió el beneficio de la remisión condicional de la pena, en tanto los demás condenados deberán cumplir las sentencias de manera efectiva.

El tribunal, integrado por los ministros Dobra Lusic, Gloria Solís y el abogado integrante Ángel Cruchaga, consideró una serie de agravantes para elevar la pena, entre ellos la relación de confianza establecida por los sujetos con sus víctimas y de la cual abusaron para concretar los ilícitos.

El director del Servicio Nacional de Menores, Eugenio San Martín, quien llegó hasta el Palacio de Tribunales para notificarse de la condena, dijo estar muy conforme con la determinación pues "se hace justicia con las niños y niñas que fueron víctimas de la red de pedofilia".

Indicó además que se trata de un fallo histórico, porque "por primera vez se condena a cadena perpetua a los involucrados en este tipo de delitos y se aplica la tipificación de asociación ilícita, lo que es una señal potente de los Tribunales respecto de que quienes vulneren los derechos recibirán las penas máximas".