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Ex subsecretaria de Previsión Social: Si hay algo mal rendido, "asumo mi responsabilidad"

Si bien reconoció una falta de orden en el departamento que encabezaba, Lissette García aseguró que "están todas las facturas y boletas de todas las actividades y gastos que se hicieron".

24 de Diciembre de 2008 | 00:36 | El Mercurio Online
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José Manuel Arcos

SANTIAGO.- Arguyendo que desconoce la resolución de la Contraloría que la vincularía a presuntas irregularidades por gastos de representación, la ex subsecretaria de Previsión Social, Lissette García (DC), aseguró que todos los gastos realizados son justificables y que asumiría cualquier "responsabilidad".


"Están todas las facturas y boletas de todas las actividades y gastos que se hicieron", dijo.


No obstante, García reconoció en radio Bío Bío una falta de orden en la administración que llevó a cabo en 2007, pues la "Subsecretaría es un equipo muy chico".


"Si yo de algo me hago un mea culpa es de que la Subsecretaría de esa época era tan pequeña... uno pasaba las boletas y no me sentaba mayormente a ver cada uno de los temas; efectivamente se puede haber traspapelado alguna", sostuvo.


En ese sentido, la ex funcionaria -cuyo partido pasó los antecedentes del caso al Tribunal Supremo- aseguró que "si hay una actividad que esté mal rendida, yo absolutamente asumo mi responsabilidad".


Cuestionamientos


La Contraloría inició un juicio de cuentas y un sumario administrativo para determinar sanciones y responsabilidades en las irregularidades detectadas por gastos de representación en la Subsecretaría de Previsión Social.

La medida tiene por finalidad determinar el destino de los gastos objetados en los movimientos de 2007, que alcanzan a $ 12.339.813, una serie de gastos no aclarados en recepciones, almuerzos y cenas, regalos y otros dispendios de dinero fiscal.


El informe de auditoría establece que de la totalidad de los gastos con reparos, $ 6.741.055 corresponden a restaurantes de distintas especialidades, tales como comida italiana, chilena, peruana, de carnes a las brasas y salones de té.

También pagó $ 948.566 en vinos, que fueron justificados como regalos a autoridades de gobierno, jefes de delegaciones extranjeras y embajadores.

Otros $ 3.365.000 fueron cancelados a una proveedora por conceptos de desayunos, cocktails y recepciones. La Contraloría no halló documentación que respaldara estos gastos.


Ante este escenario, ayer la directiva DC anunció la participación del Tribunal Supremo del partido, instancia que deberá conocer en detalle la actuación de García, quien fue reemplazada de su cargo en enero pasado.