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Directora de Salud regional aclara muerte de menor ahogada en Nogales

Dafne Secul explicó que la falta de reanimación en los primeros minutos tras el accidente marcaron el desarrollo que terminó con el fallecimiento de María Ignacia Acuña.

22 de Marzo de 2009 | 19:37 | María Pía Fouilloux, El Mercurio Online
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La menor fue trasladada a Santiago en un helicóptero de Carabineros, pero lo esfuerzos fueron en vano.

Juan Riquelme

SANTIAGO.- La directora del Servicio de Salud de Viña del Mar y Quillota, Dafne Secul Tahan, salió al paso de las declaraciones hechas por los padres de María Ignacia Acuña Traipe (3), la menor que ayer falleció tras caer a una piscina en el sector de Nogales, V Región, quienes criticaron la lentitud de los servicios médicos en la atención de su hija, algo que no sucedió tras el accidente de la hija del ministro Andrés Velasco, Ema.


Secul Tahan, además de lamentar la muerte de la pequeña, explicó a Emol que la diferencia entre ambos casos es que "a la niñita Velasco la sacaron de la piscina inmediatamente y la reanimaron ahí mismo, y ella reaccionó y estaba consciente y respirando en todo minuto".


En cambio, a María Ignacia "la sacaron de la piscina con paro cardiorrespiratorio y no la reanimaron enseguida" e insiste en que los padres de la menor "la llevaron al hospital sin reanimarla", destacando que "son esos minutos clave lo que hacen la diferencia entre un caso y otro".


"Cada minuto que un niño pasa en un paro cardiorrespiratorio, va disminuyendo sus posibilidades de vida en un 10 por ciento, por lo tanto, después de los 10 minutos transcurridos sin reanimación, las probabilidades que sobreviva tienden a cero", agregó.


Según contó Secul, María Ignacia Acuña "llegó en paro cardiorrespiratorio al hospital (Mario Sánchez de La Calera). Se siguió reanimando y durante las tres horas que duró esa acción, nunca recuperó la respiración espontánea, sino que apenas una pequeña actividad eléctrica cardiaca".


La directora contó además que los diferentes equipos médicos que atendieron a la niña de tres años "hicieron una cantidad de cosas" para salvarle la vida. "Una reanimación cardiopulmonar avanzada, con medicamentos, con oxígenos, con todo, todo durante más de tres horas".


Agregó que los profesionales trabajaron "hasta que ya sencillamente (la menor) no resistió más".


En cuanto a la oportuna llegada del helicóptero que trasladó a María Ignacia a Santiago, Secul aclaró que "este helicóptero llegó tres horas después del accidente (...) y el de la niña Velasco, lo hizo en cuatro horas" e insistió en que "los primeros minutos marcan la diferencia".

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