SANTIAGO.- Un menor de un año y nueve meses, identificado como Javier Riveros López, falleció en el Hospital de Tocopilla luego de que un furgón policial lo atropellara, cuando abandonaba la casa del niño.
Según los primero antecedentes, el vehículo llegó al domicilio del menor, para constatar que un tío de la víctima estaba cumpliendo su arresto domiciliario, y al partir, lo habría arrollado. De acuerdo a la versión de testigos, el niño estaba debajo del auto, ya que estaba siguiendo a un gato, según consignó radio Cooperativa.
Tras el accidente, los mismos funcionarios trasladaron al menor al Hospital de Tocopilla, donde murió a causa de un paro cardiorrespiratorio y un TEC abierto.
El mayor de Carabineros de esa localidad, Iván Ketterer, indicó que este caso ya está en manos de la Fiscalía Militar, mientras que el conductor del vehículo "está en calidad de imputado, en las próximas horas se va a resolver su situación en cuanto a la libertad".
Cuando los uniformados volvieron al hospital, los familiares del niño los agredieron con piedras y golpes, ya que la madre de la víctima, Tamara López, asegura que hubo negligencia por parte de ellos.
"Sentí el grito de mi abuela y ellos jamás se bajaron del furgón, mi primo tuvo que salir, el procedimiento no era en mi casa, el furgón paró en la esquina porque yo grité, porque yo pesqué a mi hijo", declaró la mujer.
Cuando el cuerpo iba a ser trasladado al Servicio Médico Legal la familia se opuso formando una cadena humana, y el vehículo sólo pudo moverse gracias a la mediación del coordinador del Plan Tocopilla, Hernán Ortega, quien señaló que la familia está recibiendo apoyo sicológico.
Los primeros peritajes fueron realizados por la SIAT de Carabineros de Antofagasta que remitirán los antecedentes a la Fiscalía Militar sin embargo, la familia dijo que debía quedar en manos de la Policía de Investigaciones (PDI).