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Salud envía cartas a posibles portadores de hepatitis C no notificados

Tras ello, serán citados por teléfono para explicarles que es posible que sean portadores de la enfermedad y ofrecerles la toma de muestra para confirmación.

16 de Abril de 2009 | 13:08 | El Mercurio Online

SANTIAGO.- A partir de hoy el Ministerio de Salud pondrá en marcha un protocolo para ubicar a las 1.400 personas que donaron sangre entre los años 2006 y 2008 y que no se les notificó que es probable que tengan hepatitis C.


La subsecretaria de Salud Pública, Jeanette Vega, anunció que se enviarán cartas certificadas a estas personas para que se acerquen a los servicios, donde se les explicará que es probable que sean portadores de hepatitis C y se les ofrecerán una toma de muestras para descartar o confirmar la presencia de la enfermedad.


Vega indicó que, de acuerdo a la evidencia científica, uno de cada cuatro sospechosos será candidato a tratamiento, mientras las otras personas seguirán en un programa de seguimiento periódico, financiado por el Estado.


La jefa de la división de control de enfermedades del ministerio de Salud, Cecilia Morales, explicó que se intentará ubicar tres veces a los portadores y por distintos medios, tras lo cual se les hará una consejería personal.


En 1996 se empezó a hacer el examen de hepatitis C a los donantes de sangre, pero si se detectaba la presencia de la enfermedad, simplemente la sangre no se usaba, impidiéndose la transmisión del mal, pero el donante no se enteraba de que estaba enfermo.

Esta situación cambió a partir de enero de este año tras una circular del Ministerio de Salud surgida luego del escándalo de los casos de sida que no fueron notificados.


La hepatitis C es una enfermedad crónica causada por un virus que hace que el hígado se inflame y deje de funcionar correctamente. Su transmisión se produce principalmente a través de transfusiones de sangre, procedimientos médicos o inyecciones con instrumentos contaminados, uso de drogas intravenosas o tatuajes.


Como antes de 1996 no era obligatorio el examen de la hepatitis C en la sangre con la que se hacían las transfusiones, algunas personas fueron infectadas. Por ello se recomienda a las personas que se hicieron una transfusión de sangre o un trasplante antes de ese año que le soliciten a su médico que les haga la prueba de la hepatitis C.

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