SANTIAGO.- Los restos de la menor Juanita Carey Moring (3), quien falleció víctima del tsunami que afectó al balneario de Pichilemu, ya descansan en paz. Sus padres, Guillermo Carey y Florencia Moring hoy están velando el cuerpo de la niña, que llegó desde el Servicio Médico Legal (SML) de Rancagua, vía Pullman Bus como una “encomienda”.
Según la orden de despacho de la empresa, el envío de los restos de la niña tuvo un costo de $2.850 y la caja con cinta de embalaje en la que los trasladaron fue clasificada como un “bulto frágil”.
El presidente nacional de la Asociación de Funcionarios del SML, José Morales, reveló las graves negligencias en las que habría incurrido el director (s) del organismo de Rancagua, doctor Juan Díaz Menares, al enviar el cuerpo de esa manera.
Según Morales, el director (s) habría considerado que los restos de la niña eran sólo osamentas y por ende, podían trasladarse en bus.
“Es primera vez que se envía un fallecido en Pullman. Eso nunca había ocurrido. La encomienda es común para las osamentas como en el caso de los DD.HH. o fósiles, también para muestras de ADN y alcoholemias (...) pero éste era un cuerpo que fue encontrado después de la tragedia”, precisó Morales.
De hecho, insistió en que la caja tampoco venía certificada, ni con la información correspondiente; a diferencia de lo que ocurre con las otras encomiendas que reciben.
“La caja venía en papel café, envuelta en cinta adhesiva. Era como una encomienda común y corriente (...). Cuando se abrió nadie sabía que los restos eran de (Juanita Carey). Lo único que tenía era la boleta de entrega, decía ‘frágil’ y que venía del SML de Rancagua. Los funcionarios supieron quién era cuando le hicieron el examen”, relató Morales.
Según la orden de despacho de la empresa, el cuerpo de la niña salió el viernes 26 de marzo desde Rancagua a las 22.54 horas; a las 10.28 del sábado pasó por Lonquén; el domingo, a las 8.20, llegó a Santiago y recién a las 14.27 horas lo recibió el SML.
Sin embargo, Morales aseveró que la caja permaneció durante todo el fin de semana en la oficina de partes de la entidad.
“La caja debe haber llegado el sábado en la mañana acá. Durante el fin de semana se quedó en la oficina de partes, donde quedan todas las cajas de Pullman Encargo. Yo estuve de turno y lo único que sé es que había una caja. Le pregunté al chiquillo que maneja y es la misma. Pullman siempre nos trae las encomiendas el sábado, si fue despachada el viernes, el sábado la traen para acá”, afirmó Morales.
Asimismo, recalcó que el cuerpo de la niña debió haber sido transportado en un vehículo del organismo. “Lo ético era que se trasladara a la niña en un auto del SML, si no hay en Rancagua, se llama a Santiago y un chofer va y lo busca. Lo hemos hecho siempre”.