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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 01:33
TALCAHUANO.- Una querella por cuasi delito de homicidio en contra de quienes resulten responsables de la falla en el decreto de alerta de tsunami el 27 de febrero, interpusieron los familiares de cuatro personas que murieron ahogadas en caletas costeras de Talcahuano.
Las víctimas fatales son el guardia de seguridad de la Aduana de Talcahuano, Juan De Dios Gutiérrez Rioseco (70), los pescadores artesanales de caleta Tumbes, José Del Carmen Tapia (69) y Armando Domínguez (59) y su antiguo alcalde de mar, Marcial Badilla (92).
Entre otras diligencias, los familiares exigen que sean interrogadas autoridades de Gobierno, Armada de Chile, Onemi, municipales y parlamentarias que descartaron la alerta de maremoto, razón por la cual las personas no escaparon de la costa y murieron ahogadas.
Loreto Muñoz, nieta de Juan De Dios Gutiérrez, cuenta que su abuelo tenía una radio personal en su caseta de guardia en la Aduana "donde podría haber escuchado que la autoridad decía que no había ningún tipo de alarma. Es probable que por eso haya quedado en su lugar de trabajo".
A José Del Carmen Tapia lo sorprendió la segunda ola del tsunami cuando volvió al interior de su casa en busca de su inhalador porque era hipertenso y sufría de asma, pero no alcanzó a salir y murió aplastado por el inmueble, cuenta su esposa Nancy Bello Mora.
Los familiares de las víctimas fueron acompañados en su acción legal por el senador del MAS, Alejandro Navarro, quien asegura que los organismos de la Armada y el Gobierno "entregaron información inadecuada e inoportuna que provocó estas muertes".
En la ocasión, el senador llamó al Presidente Sebastián Piñera a crear una ley nacional de reparación a las familias de las víctimas del maremoto. Mientras, recalcó que continuará apoyando las denuncias de los afectados.
