Dictan condena contra pastora aimara acusada por muerte de su hijo

SANTIAGO.- A 10 años y un día de reclusión fue sentenciada hoy la pastora aimara Gabriela Blas, declarada culpable de la muerte de su hijo tras abandonarlo en un lugar solitario.

El sábado pasado el tribunal oral de Arica desechó que el fallecimiento en el altiplano del niño Domingo Eloy haya sido un accidente propio de una labor indígena, como invocó la defensa de la mujer.

Los magistrados, en forma unánime, desestimaron la tesis que señalaba que Eloy se perdió en la estancia de Caicone cuando la pastora buscaba dos llamas rezagadas. Tal tesis había sido respaldada por expertos culturales de la Conadi que declararon a los jueces que el extravío de niños es un riesgo propio del pastoreo.

Según los jueces, "Gabriela Blas tuvo una conducta anómala para una madre, independiente de su origen étnico".

El niño fue hallado en diciembre de 2008 a 12 kilómetros de Caicone, pero el juicio no logró aclarar cómo llegó hasta allí.

Gabriela Blas ya lleva casi 3 años recluida en la cárcel Acha de Arica, por lo que le quedarían 7 años de reclusión.