CURICÓ.- Una millonaria indemnización recibirán los familiares de las tres víctimas fatales que dejó un accidente de tránsito ocurrido en el verano de 2007 en la Ruta J 60, que une a la ciudad de Curicó con el balneario de Iloca, en la Región del Maule.
El monto, que asciende a los 105 millones de pesos según lo dictaminado por el Juzgado de Letras de Molina, deberá ser pagado por la empresa de buses Andrea, protagonista del hecho.
En la tarde del 24 de febrero de 2007, una de las máquinas de la compañía que viajaba a la costa impactó con un camión que estaba estacionado a un costado de la berma.
Debido al violento impacto, una veintena de pasajeros resultó con heridas de diversa consideración, mientras que Nelly del Carmen Valdés Campos (56), Pablo Reyes Acevedo (32) y María Julia Cáceres Cabrera (54) perdieron la vida.
De acuerdo a lo informado por Radio Bío Bío, la justicia resolvió que el conductor del bus no iba atento a las condiciones de tránsito y que además fue encandilado por el sol.
La indemnización que decretó el juzgado fue considerada "insuficiente" por el abogado Cristián Merino, quien confirmó que acudirá ante la Corte de Apelaciones de Talca.