La antecesora de Joaquín Lavín dijo que no se siente ''atacada'' por las denuncias.
Claudio Bueno, El Mercurio.SANTIAGO.- Como un reclamo "un poquito exagerado" calificó la ex ministra de Educación, Mónica Jiménez, los desórdenes administrativos que fueron denunciados por las actuales autoridades de la cartera, encabezada por Joaquín Lavín.
A juicio de Jiménez, "el ministro necesita generar un contexto donde se puedan explicar las desvinculaciones del personal que él está haciendo".
De acuerdo a lo consignado por Radio Cooperativa, la ex ministra de la era de Michelle Bachelet dijo que no se siente "atacada" por las anomalías que fueron reveladas por una auditoría y, que entre otras, incluye el pago de sueldos a personal ya renunciado, el arriendo de inmuebles vacíos y la existencia de una bodega con notebooks, plasmas y microondas.
"Este año se entregaron 60 mil computadores, y que queden 150 en la bodega no es ningún hecho espantoso", aseguró la ex ministra, resaltando que se trata de equipos destinados a niños que se cambiaron de vivienda y que no han podido ser ubicados.
"Si ellos pueden hacer una gestión impecable, bueno, muy bueno para Chile y el ministerio", añadió Jiménez, al tiempo que indicó que considera que detrás de las críticas a las anteriores autoridades de Educación "hay un tema comunicacional".
En esa línea, la ex secretaria de Estado comentó además que "en cada uno de los temas, si se conversa con los funcionarios responsables se podrán dar explicaciones, y habrá otros temas que son errores y en buena hora que los descubrieron y los van a corregir".