PDI busca en el desierto y en el altiplano a holandés prófugo de Perú

SANTIAGO.- Una intensa búsqueda están realizando decenas de detectives de Arica para dar con el paradero del ciudadano holandés Joran Van Der Sloot (23), quien es requerido en Perú por la muerte de la hija de 21 años del conocido corredor de autos y empresario de ese país, Ricardo Flores, "Riflo", el pasado 30 de mayo.

El joven extranjero es sindicado como el autor de la muerte de Stephany Flores Ramírez, de 21 años, tras contactarla en el casino Atlantic City de Lima, para luego acudir juntos hasta una hostal de la avenida República de Panamá, donde horas más tarde apareció su cuerpo sin vida.

Tras el hecho el prófugo huyó a Chile con la ayuda de dos ciudadanos peruanos que ya fueron interrogados por la policía de ese país.

Según informó a Emol el subprefecto Nelson Oyarzún, jefe de la Prefectura Provincial de Arica, más de 75 efectivos se encuentran realizando la búsqueda en vehículo en el sector de Putre, en el altiplano y el desierto.

A ello se suman las diligencias que ya se han hecho en todos los hoteles, moteles, residenciales, Pub’s y restaurantes de la región. Incluso ya se buscó en el Morro de Arica sin éxito.

También hay decenas de detectives realizando controles vehiculares en todas las carreteras entre las regiones de Arica y Atacama, y en todos los controles migratorios de todo el país.

"Creemos que no ha salido de la región, porque no hemos tenido de aeropuertos, carreteras ni por los pasos habilitados", señaló el jefe provincial.

Oyarzún agregó que anoche se solicitó a la policía peruana que indague si el extranjero realizó transacciones bancarias y si usó tarjetas de crédito con el fin de detectarlo en Chile mediante ese mecanismo, y saber en qué región estaría.

No quedará detenido

El subprefecto Oyarzún planteó que si se le detiene, el joven holandés no quedará detenido, ya que aún no llega a nuestro país la orden de captura.

"Si es hallado, sólo se le hará un control de extranjero, se le puede retirar sus documentos identificatorios, luego se le tomará una declaración por escrito y se deja sujeto a firma en una unidad nuestra. Luego queda en libertad y se fija un domicilio. No puede quedar detenido porque no tenemos sustento legal ni orden de captura internacional", señaló el jefe policial, que agregó que la orden llegue entre tres y cinco días en llegar a los registros de la PDI.

Consultado de si esas medidas darían tiempo de escapar al holandés, aseguró que es "casi imposible, porque cuando queda sujeto a control de firma, le podemos dejar ordenado que vaya a firmar cada una hora, dos horas o dos veces al día a un cuartel. Y si falta a una de ellas se activa un operativo de búsqueda inmediatamente".