SANTIAGO.- Cerca de dos horas y media duró una manifestación realizada al interior de la Catedral por los trabajadores de la empresa Buses Gran Santiago que acusan al gobierno de pasar a llevar sus derechos laborales.
El vocero de los manifestantes, Eric Yapur, precisó que el Ministerio de Transportes "nos rompió una huelga legal. Nosotros presentamos un proyecto de contrato colectivo y dentro de ese proceso votamos la huelga, fue entonces que el Gobierno traspasó todos los servicios a la empresa Alsacia, dejándonos sin nada".
Según agregó el dirigente, con el cambio de los recorridos de los buses 306 y 311 a otra línea de transportes, se dio por finalizada la manifestación y "quedamos sin terreno, quedamos en el aire no más".
Junto con criticar la forma en que el gobierno suplió los servicios con máquinas de otra compañía, enfatizaron que los vehículos dispuestos en las instalaciones de la empresa fueron retirados.
Según Yapur, si el Ejecutivo dice que ellos no se involucran en los problemas de privados, "por qué tomó caso en este asunto, si es un conflicto entre la empresa (Gran Santiago) y nosotros".
Comentó que han entregado dos cartas a la autoridad de Gobierno y "hemos querido conversar con el coordinador del Transantiago, y con el ministro Felipe Morandé, pero no nos han querido recibir".
Respecto a la toma en la Catedral, Yapur manifestó que ésta se depuso pacíficamente cuando el Cardenal Francisco Javier Errázuriz se comprometió a que el Vicario de la Pastoral Social y de los Trabajadores, Rodrigo Tupper, los recibiría.
La idea, aseveró el vocero de los manifestantes es que Tupper "sea el mediador entre sus demandas y el Gobierno".