Video: La mina, antes y después del derrumbe
SANTIAGO.- Pese a que el gerente de la minera San Esteban, Alejandro Bohn, dijo que cuentan con las condiciones establecidas para funcionar, el ex asesor de la compañía Nolberto Contador, quien trabajó en el estudio para reabrir el yacimiento San José en 2008, aseveró que el derrumbe que mantiene atrapados a los 33 mineros "era evitable".
En entrevista con "El Mercurio", el experto que trabajó en el estudio geotécnico -a través de E-Mining Technology- precisó que hace dos años se recomendó una serie de medidas para mejorar la seguridad al interior de la mina.
Para ello, dice, "usamos los mejores estándares de la industria para hacer el análisis" y se entregaron "las recomendaciones de monitoreo necesarias para trabajar". No obstante, asegura que algunas mejoras no fueron implementados, como por ejemplo, el sensor microsísmico, el cual "nunca operó".
"El desastre era evitable y la responsabilidad es de la minera", asevera en forma categórica Contador, apuntando sus dardos contra Bohn, quien declaró días atrás que el estudio realizado por E-Mining "no indicaba un peligro como el que estamos viviendo".
A su juicio, con dichas palabras, el gerente de minera San Esteban "intentó blindarse", ya que "no dijo que no había cumplido con los monitoreos que solicitamos".
Contador además descarta cualquier suspicacia de que la misma empresa que hizo el estudio y que permitió la reapertura de la mina, luego la opere.
"Son procesos paralelos, que no los hago yo, porque me dedico a la geotécnica, pero fue aprobado por mí. Durante los primeros cuatro meses anduvo todo muy bien, pero de repente empezó a caer. Alejandro (Bohn) empezó a poner restricciones económicas e incluso los pagos se atrasaron. Comenzamos a tener problemas, porque no se implementaron las medidas de seguridad que se requerían", precisa.
En ese sentido, niega cualquier responsabilidad de E-Mining en la falta de seguridad del malogrado yacimiento.
"Es como si yo trabajara en un edificio y subiera por un andamio porque no tengo una escalera. En ese caso, le digo al dueño del edificio que me tiene que tener un escalerado interno. Y él no lo pone y yo sigo operando, pero estoy pidiendo la escalera", explica.
"¿El accidente le deja alguna enseñanza? Vamos a tener que ser más selectivos con los clientes", concluye.