Arzobispo de Concepción facilitará el diálogo entre el Gobierno y los mapuches

SANTIAGO.- Cuando se cumplen 65 días de la huelga de hambre mapuche, el arzobispo de Concepción, Ricardo Ezzati, aceptó la petición del Ejecutivo de asumir como facilitador del proceso de diálogo entre el Gobierno y los 35 presos comuneros para que depongan la medida.

Así lo informó el ministro secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet, tras sostener una extensa reunión con monseñor Ezzati en La Moneda.

"Queremos agradecerle a monseñor Ezzati su voluntad para participar como facilitador, como mediador, en conversaciones, de tal manera que nuestros hermanos que están en huelga de hambre puedan deponer esa huelga (...) Nosotros hemos llamado a ese proceso de reencuentro y monseñor Ezzati ha aceptado esa responsabilidad", señaló.

El ministro detalló que el arzobispo "va a encargarse en los próximos días de adoptar las conversaciones con quienes correspondan para poder facilitar ese proceso" de diálogo.

Consultado sobre si finalmente se instalará una mesa de diálogo, la autoridad indicó que "los detalles de ese proceso se están construyendo" y "en los próximos días vamos a ir informando oportunamente" de las gestiones del religioso.

Por su parte, monseñor Ricardo Ezzati agradeció que el Gobierno haya accedido a dialogar con los comuneros mapuches y explicó que "la tarea que a mí me corresponde es simplemente facilitar que esta mesa esté abierta y que las personas interesadas estén invitadas".

Añadió que "finalmente le corresponde al Gobierno y a las comunidades mapuches poner sobre la mesa los problemas que quieran dialogar y creer que, con la razón y el diálogo, se pueden superar los problemas".

En la oportunidad, el arzobispo de Concepción -quien retornará esta noche al sur del país- insistió en llamar a los comuneros mapuches a deponer la medida de presión. "La huelga de hambre, que puede ser legítima hasta cierto momento, se vuelve también ilegítima cuando atenta al bien fundamental, que es la vida", sostuvo.