Caso Pilar Pérez: Defensa acusa contradicciones de la hija de la imputada

SANTIAGO.- Tras iniciarse el contrainterrogatorio a la hija de María del Pilar Pérez, Rocío Zamorano Pérez, el abogado de la principal acusada por los homicidios de Diego Schmidt-Hebbel, Héctor Arévalo y Francisco Zamorano, Mario Palma, cuestionó el testimonio, señalando que hay evidentes contradicciones con lo señalado por la testigo en el pasado.
 
Una de las declaraciones recordadas por el profesional fue una que Rocío Zamorano realizó el 18 de noviembre de 2008, donde la mujer señaló que no dudaba de la inocencia de su madre en relación al crimen de su padre y su pareja Héctor Arévalo, y que era Francisco Zamorano el que habitualmente hablaba mal de la arquitecta.

Dicha declaración fue exhibida en la audiencia por el abogado, quien le solicitó a la propia Rocío que la leyera ante el tribunal.

Tras ello, la doctora argumentó que esa afirmación fue un error y que lo que realmente pasó fue todo lo contrario.

Palma también exhibió una declaración prestada por la hija de la imputada el 8 de mayo de 2008, donde ella dijo creer que no existía ninguna razón para que su madre estuviera implicada en el crimen de su padre, ya que entre ellos "estaban todos los problemas solucionados".

Palma centró además sus preguntas en un escrito enviado por Rocío Zamorano al Ministerio Público tras los asesinatos de su progenitor y Arévalo, donde la mujer planteaba que un primo de su padre, a quien le arrendaba un departamento interior en el segundo piso de su casa, en calle Infante, pudo haber tenido alguna participación en los hechos.
 
Zamorano Pérez declaró que, en ese momento, tuvo sospechas de la autoría de Claudio Soza, pero que más tarde el tema se aclaró y llegó al convencimiento de que el supuesto asesino a sueldo, José Ruz, fue quien ejecutó a su padre y su pareja.

Finalmente el abogado hizo hincapié en que en un comienzo la hija de María del Pilar Pérez apoyó a su madre, lo que quedó de manifiesto en una carta que le envió a la cárcel, donde se despide de ella diciendo "fuerza madre mía, un beso gigante", muy alejado de las palabras que ha utilizado estos últimos días para referirse a la acusada.

La testigo argumentó que la misiva a la que aludió el abogado sólo fue escrita por conveniencia, "porque estábamos tratando de mantener relación con ella para así obtener información que concluyó con la última carta que finalmente ella nos mandó", donde les pide pagarle al presunto sicario para que cambie su declaración.
 
Con esto la hija de María del Pilar Pérez concluyó su declaración, y ahora se espera que dentro de la semana su hermano, Juan José Zamorano Pérez, sea citado a declarar ante los magistrados.