Arzobispo de Santiago destaca legado de monseñor Valech y lamenta pérdida de un "amigo"

SANTIAGO.- Apenado se mostró el arzobispo de Santiago, cardenal Francisco Javier Errázuriz, tras el sorpresivo deceso de monseñor Sergio Valech, símbolo de la lucha por los derechos humanos durante dictadura.

El purpurado encabezó esta mañana el Consejo de Vicarios de la Arquidiócesis de Santiago, en el cual fue establecido que el velatorio se realice desde el mediodía en la Catedral de Santiago, proceso que terminará el viernes con una misa funeraria a las 13:00 horas.

Errázuriz expresó su pena por perder a quien calificó como "un amigo entrañable" y "ejemplo para todos los chilenos", en vista de que donó gran parte de su herencia familiar para construir hospitales y centros de atención social.

"Fue una persona que vivió con gran sencillez y con mucha pobreza, que teniendo muchos bienes fue sumamente generoso. Su corazón siempre estaba pastoralmente en prestar servicios a las capillas más pobres y, al mismo tiempo, una disponibilidad enorme frente a nuestro país para poder ayudarnos en los caminos de reconciliación y también en poder sanar heridas del pasado", expresó.

Respecto al cáncer pulmonar que padecía monseñor Valech, el cardenal dijo sentir "alegría" porque "Dios le evitó así una enfermedad larga y complicada" y, a su vez, "tristeza" pues "no podremos disfrutar de conversaciones donde él participaba en forma muy viva del acontecer de nuestra patria, de la Iglesia".

El viernes por la tarde, posterior a la homilía funeraria, los restos del prelado abandonarán la Catedral de Santiago para ser llevados al Cementerio General.