Joven que sobrevivió a mortal choque en Autopista del Sol: "Era como una carnicería"

SANTIAGO.- Un "milagro" es la única razón que para María Fernanda Contreras Belmar explica por qué salvó con vida del trágico accidente que sufrió el bus en que viajaba desde San Antonio a Santiago, en la mañana del pasado martes.

"Yo digo que fue de milagro que me salvara. Yo estaba en la mitad, en el asiento 21.  Fue algo súper impactante. Yo puedo decir que físicamente estoy bien, pero sicológicamente estoy impactada, porque igual vi y era como una carnicería. O sea, ver gente que yo conocía, verlos ahí agonizando...", relató hoy la joven de 23 años, con visibles magulladuras y heridas en su rostro, brazos y manos.

La estudiante de Diseño Gráfico accedió a hablar con la prensa en su habitación de la Mutual de Seguridad, donde esta mañana fue sometida a un scanner para analizar el estado de su columna vertebral y determinar si puede ser dada de alta, aunque se queja de fuertes dolores.

"Físicamente me siento cansada y adolorida. Caminar me ha sido muy difícil, porque siento un peso súper grande en la espalda. Estoy demasiado adolorida, debe ser por los machucones", confesó.

Sobre el momento del accidente, la joven aseguró que iba durmiendo y despertó porque sintió frío. Luego ocurrió la tragedia.

"Lo que yo vi fui que el chofer dio como una vuelta en U y para mí fue en dos pasos, la vuelta en U y cuando cayó. Pero no sentí el golpe con el camión, ni cuando se quebraban vidrios ni los gritos de las personas. Cuando terminó el choque yo levanté la cabeza y vi que estaba súper lejos del bus", narró María Fernanda, quien debido al impacto quedó a diez metros del vehículo de pasajeros, en medio de unos matorrales.

"Inmediatamente me saqué el marco de la ventana que tenía encima y vi que el señor que estaba al lado mío en el bus, ahora estaba debajo mío, muerto, y la señora que estaba al otro lado gritaba y se quejaba mucho. Las heridas que tengo son de las espinas, porque caí en unos matorrales. Intenté bloquear el dolor para sacarlas", prosiguió.

La estudiante recordó que tras el accidente incluso hubo rumores de que el bus iba a explotar, por lo que los equipos de rescate alejaron de la máquina a los pasajeros que quedaron vivos.

"Luego me estiraron en el suelo y ahí ya no pude hablar ni moverme. Había personas con las que viajaba frecuentemente y que estaban muertas. Fue bien impactante, porque no verlos más... Igual tengo las imágenes de ellos", continuó.

La joven, madre de una hija de 5 años, descartó que el conductor se haya quedado dormido mientras conducía, porque iba con el auxiliar, quien lo podría haber alertado. "He viajado muchas veces con ellos y son súper responsables, el auxiliar preocupado de la gente y nunca había pasado algo así", aseguró.

En cuanto al uso del cinturón de seguridad en los buses, Contreras consideró que es una responsabilidad tanto del pasajero como de los auxiliares de la máquina: El primero en usarlo y el segundo en pedir que esté disponible para su empleo.

Los médicos estiman que María Fernanda será dada de alta durante esta jornada o mañana viernes, dependiendo de su evolución.

"Ahora voy a aprovechar todo lo que tengo, sobre todo en la parte emocional, a mi hija, mi familia y a mis amigos", reflexionó la joven, acompañada de su pequeña Antonia.