José Toledo deberá continuar con su reposo en Chile.
JERUSALÉN.- José Toledo Dominas, el chileno que fue
agredido en Jerusalén a principios de noviembre por un grupo de jóvenes israelíes que creyeron que era árabe, regresará al país el próximo jueves, según confirmó.
Toledo precisó que está prácticamente recuperado de las hemorragias intracraneal y ocular con las que fue ingresado en la unidad de neurocirugía del hospital Hadasa Ein Kerem, junto a Jerusalén.
"Me han recomendado un mes más de reposo en Chile, aunque estoy bastante mejor, se han borrado los signos que tenía, y la visión y los derrames están bastante bien", precisó.
Toledo, de 43 años y residente en Madrid, donde hace un doctorado en la escuela de Sociología de la Universidad Complutense, regresará de momento al domicilio de su familia en Santiago.
"Espero el momento de ver a mis padres y compartir con ellos un almuerzo", señaló.
Antes hará una gira turística de tres días por Jerusalén, Tiberíades y Tel Aviv junto con su hermano, que vino a hacerle compañía durante la convalecencia y que les ha ofrecido el Ministerio israelí de Turismo.
"El tour de tres días no hará a Toledo olvidar la difícil experiencia que ha sufrido, pero espero que al menos le permita ver la parte bonita de Israel, sus habitantes y sus lugares", señaló el ministro israelí de Turismo, Stas Misezhnikov, en un comunicado que anuncia la invitación.
Misezhnikov reconoce que "el fenómeno de la violencia" y "las motivaciones racistas que caracterizaron el ataque, pues el turista fue atacado porque sus asaltantes pensaron que era un árabe" son una "mancha" en la sociedad israelí y en su "imagen en el mundo".
Toledo admite que "muchos dirán" que la gira es un "lavado de imagen" de Israel tras la agresión, pero él subraya la "imagen positiva" que tiene del país y la "atención" y las "disculpas" que ha recibido desde la agresión, efectuada por ocho jóvenes.
"Creo que me quieren dar una segunda oportunidad de hacer lo que venía a hacer antes de la agresión, que es conocer el país", dijo en referencia a los planes turísticos que tenía tras asistir a la boda de un amigo en Israel a finales de octubre.