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Ministro de Transportes declara en juicio oral contra Pilar Pérez

Felipe Morandé detalló la reacción de los padres de Diego Schmidt-Hebbel tras el crimen del joven economista y el daño moral que este hecho les ha provocado.

09 de Diciembre de 2010 | 15:42 | Por José Manuel Olivares, Emol
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El ministro declaró hoy en su calidad de amigo íntimo de la familia del asesinado economista Diego Schmidt-Hebbel.

Manuel Herrera, El Mercurio

SANTIAGO.- El ministro de Transportes, Felipe Morandé, entregó hoy su testimonio en el juicio oral en contra de María del Pilar Pérez y su presunto sicario José Ruz, en su calidad de amigo íntimo de la familia del asesinado economista Diego Schmidt-Hebbel.


"La familia sufrió mucho. Hay cambios fundamentales, desde el punto de vista emocional, esa familia sufrió un golpe muy duro, por la pérdida y por la forma en que ésta ocurrió", señaló el secretario de Estado, cuya declaración apunta a demostrar el daño moral que generó la muerte del joven en sus familiares.


El ministro señaló que en el caso de la mamá de Diego Schmidt-Hebbel, Greta Niehaus, la muerte de su hijo significó un cambio rotundo en su vida, al punto de que ella nunca más volvió a ser la misma.


"Greta era muy feliz, alegre y optimista, tenía una visión muy positiva de la vida. Pero claramente eso cambió. Ella ha tratado de volver a tener esa alegría, pero le ha costado, ya que tiene la imagen de Diego todos los días, es como una espina que tiene en el corazón que no la deja llevar su vida de manera normal", comentó Morandé.


Respecto al padre del joven, Klaus Schmidt-Hebbel, el ministro recordó que él lo fue a buscar al aeropuerto luego que se enterara de la muerte de su hijo, y que pese a que su amigo es en general una persona más bien fría, ese día lo vio quebrarse.


"Lo fuimos a buscar y se puso a llorar profundamente, nos dimos un abrazo de esos que uno nunca va a olvidar. Es el reflejo del momento que vive un padre frente a esa pena que tenía guarda", afirmó.


Asimismo, Felipe Morandé dijo que él y el grupo de amigos más cercano al matrimonio han tratado de desviar la atención de ambos hacia otros temas que no estuvieran relacionados con la muerte de Diego.


"Cuando nos juntamos tratamos de distraer sus pensamientos hacia otras cosas, pero la conversación siempre termina por volver a Diego", sostuvo, agregando que él ve que el matrimonio intenta salir adelante y superar el dolor, pero que el crimen de su hijo "es una sombra que no pueden dejar atrás".


En ésta jornada también declaró la psiquiatra Berta Newman, quien atendió a Greta Niehaus, antes y después del asesinato de Diego Schmidt-Hebbel, y percibió un cambio importante en su estado emocional.


"La primera vez encontré una paciente en perfecto estado físico, emocional, llevaba una vida muy sana  (…) Luego la encontré muy nerviosa, presentaba enfermedades traumáticas, entre ellas insomnios. Recuerdo que paso hasta 11 días sin dormir", relató.


Asimismo, la profesional señaló que la muerte de su hijo marcó a tal punto a su paciente que no se puede dar un pronóstico de ella, ya que es una persona que tiene que estar chequeándose constantemente.