Destruyen imagen de Santa Bernardita ubicada en la gruta de Lourdes

        Bernardita Soubirous, la vidente de Lourdes de Francia, nació el 7 de enero  de 1844. El 11 de febrero de 1858 tiene la primera aparición de la Virgen en la roca de la gruta de Lourdes. Tuvo dieciocho encuentros con la Virgen María, el último se produjo el 16 de julio de 1858.

        Ingresó al convento, lejos de Lourdes de Francia, 7 de julio de 1866. Y el 16 de abril de 1879 (era miércoles de Pascua), muere Bernardita.

        Fue beatificada por el Papa Pio XI el 14 de junio de 1925 y el 8 de diciembre de 1933 es canonizada  por el mismo Papa Pío XI.

        Esta imagen fue colocada en la gruta después del año 1925, pues no se podía rendirle culto sin estar beatificada. Existen imágenes fotográficas del año 1925 y no se ve la imagen de la santa en la gruta. Es probable que se haya colocado alrededor del año 1933, de tal modo que esta escultura (de yeso) ha estado expuesta a la veneración de los fieles desde hace unos setenta y cinco años. Es muy probable que esa imagen haya sido traída de Francia.

        El destrozo que ha ocurrido en la gruta de Lourdes de Santiago, a primera vista, se trataría de un atentado dirigido solamente a esa imagen. No hay otros daños en el recinto.

        Surgen inmediatamente muchas interrogantes sobre este acto desquiciado.

        Si no hubo robo ni daños en otras cosas del lugar, resulta muy extraño lo sucedido.

        Sin duda hay muchas personas que detestan las imágenes religiosas, pero un acto así daña la sensibilidad de miles de personas católicas que veneran con inmenso respeto las imágenes que representan al Señor, a la Virgen y a los santos.

        Toda imagen o escultura tiene un valor simbólico, más allá de lo material. A nadie se le ocurriría destruir la estatua de un Padre de la Patria, ni profanar el emblema patrio. Tampoco destruir una fotografía de su madre, de su hermana o de un ser querido.

        La Iglesia no juzga ni condena, menos aún cuando ignoramos la autoría del atentado. Sólo nos corresponde establecer la verdad, perdonar, y finalmente implorar la conversión de esa o esas personas, cualquiera sea su condición.

        Se puede decir con certeza que son millones de chilenos y chilenas que, con el paso de los años han contemplado esta imagen en la gruta de la Comuna de Quinta Normal. Siendo de material sencillo ha resistido la lluvia, el viento, los terremotos y el deterioro normal de una escultura expuesta a la intemperie, cada cierto tiempo reparada y pintada.

        Lamentamos profundamente este acto y lo reprobamos.

        Se dio  el aviso correspondiente  a Carabineros de Chile para denunciar este acto vandálico. Por unas horas se cerró la entrada a los fieles.