Universidades privadas del CRUCh acusan "quiebre de confianza" con planteles estatales

SANTIAGO.- Nada de bien cayó entre los directivos de las nueve universidades privadas del Consejo de Rectores (G-9), el documento que envió el Consorcio de Universidades Estatales al ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, donde le solicitaban un trato preferente a esos planteles. El texto fue entregado en una reunión que sostuvieron la semana pasada estos últimos con el secretario de Estado.

La molestia se la hicieron saber esta mañana los miembros del G-9 a sus pares de las universidades estatales durante la sesión plenaria del Consejo de Rectores (CRUCh) que se realiza en la casa central de la Universidad Católica.

"Como G-9 he manifestado nuestra profunda molestia por los dobles discursos y vías paralelas que han tenido las universidades estatales (...) que por una parte se trabaja en común, y por otra parte a nivel público se muestran propuestas y posturas que claramente afectan el común desarrollo del Consejo de Rectores", sostuvo el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, quien preside el G-9.

El académico fue más allá y sostuvo que "hay un quiebre bien profundo en las confianzas y en el trabajo conjunto y esperamos que se pueda recuperar pero en este momento que los más adecuado es manifestarlo y ver cómo podemos recuperar las confianzas".

A juicio de Sánchez, "es lícito que el CUECh (Consorcio de Universidades Estatales) realice sus documentos, lo que no nos parece es que ese documentos desconoce los aportes que estas nueve instituciones realizan" y que intenten demostrar que "todo lo importante para este país naciera en las universidades estatales".

Por el contrario, el rector destacó el gran aporte que realizan estas instituciones al país, ya que concentran más del 50% de la educación de pre y posgrado y llevan a cabo más de la mitad de las investigaciones, destacando en los rankings internacionales.

"Es un patrimonio del país que se debe cuidar y es muy importante que estas instituciones tengan el desarrollo y el respeto que se merecen", subrayó.

Pese a que admitieron este quiebre, Sánchez descartó que estén evaluando su permanencia en el Consejo de Rectores y que esperan poder "recuperar las confianzas para trabajar en conjunto las reformas que se tengan que implementar".