Ex Presidente Lagos insiste en propuesta para legalizar drogas: "La guerra se está perdiendo"

SANTIAGO.- "La guerra se está perdiendo". Con esa frase el ex Presidente Ricardo Lagos sustentó su polémica propuesta destinada a legalizar las drogas en Chile, que reiteró durante un debate sobre el tema realizado este martes en Santiago.

El encuentro, organizado por la Universidad del Desarrollo, tuvo como participantes junto al ex Mandatario al economista Klaus Schmidt-Hebbel, el coordinador general del Instituto Nacional de Políticas Públicas para el combate contra el consumo de alcohol y drogas de Brasil, Ronaldo Laranjeira, y el ex administrador de la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos.

Lagos consideró que "está fallando el paradigma" aplicado hasta ahora en el mundo en torno al combate al narcotráfico.

El ex jefe de Estado consideró que un elemento clave para poner en marcha dicha legalización será "la regulación, el tipo de regulación" que se adopte con ese fin. "De otra forma no va a funcionar", aseveró.

Al mismo tiempo, consideró necesario desarrollar un "paquete de medidas" que brinden apoyo a quienes sufren adicción. "Después de hacer todo eso, estamos en condiciones de decir: intentemos legalizar por lo menos la marihuana", recomendó.

Schmidt-Hebbel coincidió con planteamientos del ex jefe de Estado e hizo notar la importancia de entregar "más recursos para la educación" destinada a prevenir el consumo en niños y jóvenes.

Al mismo tiempo, el economista recordó la trágica masacre ocurrida en México que costó la vida a 43 estudiantes. "Si las drogas hubieran sido parcialmente legales, el alcalde (de Iguala, José Luis Abarca) no hubiera sido corrompido por las pandillas de drogas y no hubiera indirectamente asesinado, a través de los oficiales de policía y las bandas narcotraficantes, a esos jóvenes", explicó.

Ex jefe DEA: Medida tendría "muy alto riesgo"

Desde la vereda opuesta, Laranjeira advirtió que la legalización de las drogas probablemente aumentará el número de usuarios y se mostró contrario a permitir el consumo del cannabis.

Bonner, en tanto, consideró que la legalización propuesta "sería irracional y de muy alto riesgo en Chile y en cualquier sociedad", y desestimó que una medida como esa disminuya las peligrosidad de los grupos delictuales.

"Las organizaciones criminales simplemente no desaparecen, incluso si se legaliza la fabricación y venta de drogas. Estas organizaciones seguirán suministrando drogas a través del mercado negro y aumentarán igualmente sus utilidades practicando otro tipo de delincuencia", advirtió.