A dos meses de promulgada la Ley Emilia sus padres lanzan fundación en Viña del Mar

SANTIAGO.- El 15 de septiembre pasado, la Presidenta Michelle Bachelet, promulgó la denominada "Ley Emilia", que aumentó las penas para quienes causen accidentes mientras conducen tras haber bebido alcohol. Y la fecha no fue casual, pues la ceremonia se produjo días antes del fin de semana largo de Fiestas Patrias.

Hoy se cumplen dos meses desde la implementación de la normativa, que hizo que 730 conductores que habían bebido fueran sacados de las calles por Carabineros durante el fin de semana patrio de este año.

Este sábado también tiene un significado especial para Benjamín Silva y su esposa Carolina Figueroa, los padres de Emilia, la menor de sólo 9 meses que falleció el 21 de enero de 2013 luego de que el auto en el que viajaban fuera chocado por Nelson Fariña Jara, quien iba en evidente estado de ebriedad, en Vitacura. El matrimonio realizará el lanzamiento oficial de la fundación que lleva el nombre de su hija.

La "Fundación Emilia Silva Figueroa, Víctima de Accidentes", comenzará a operar desde hoy en la ciudad Viña del Mar, donde viven Benjamín y Carolina. El presidente ejecutivo de la entidad será el padre de la pequeña víctima, quien explica los alcances de la iniciativa y lo que esperan lograr.

¿Cuáles son los fines que persigue la fundación?

"Tenemos tres grande objetivos. El primero de ellos es implementar campañas de sensibilización y educación que desarrollen un cambio cultural, el cual debe generar una nueva ciudadanía más responsable de su comportamiento en la plaza pública. A ello se suma el acompañar a  víctimas y sus familias, afectados por crímenes causados por el manejo en estado de ebriedad. Y por último, el generar investigación que permita levantar nuevas políticas públicas, tendientes a colaborar en la construcción de una ciudadanía más responsable de su comportamiento".

¿Qué acciones han adoptado ustedes para conseguir los fondos necesarios para su funcionamiento?

"Hemos tocado las puertas de la empresa privada, el Estado, parlamentarios, gobiernos locales y organizaciones sociales. Esperamos poder trabajar con el apoyo de todas estas instancias, ya que la calle no discrimina: mata, provoca lesiones graves y gravísimas. Por ello buscamos tener apoyos transversales, que nos permitan implementar nuestros objetivos y sobre todo formar esta ciudadanía más responsable de su comportamiento, la cual no acepte bajo ninguna circunstancia la conducción bajo la presencia de alcohol y las sustancias psicotrópicas".

¿Cuáles serán las primeras iniciativas de la fundación?

"Esperamos desarrollar un ciclo de charlas se sensibilización y educación, destinadas a estudiantes de enseñanza media de todo tipo de establecimiento escolares, y que abarquen también el ámbito universitario y técnico profesional. El objetivo es lograr ayudar en la construcción de esta ciudadanía más responsable. También realizar un proyecto de investigación que analice y proponga nuevas políticas públicas en el tema de la educación vial, basado en la experiencia internacional de Europa y Asia, que tienen en estos temas un camino recorrido, con mucho mejores cifras que las nuestras. Asimismo, apoyar corridas, ya que en ellas se ve a personas muy identificadas con la Ley y sus consecuencias. Por último vamos a iniciar una campaña de captación de socios y simpatizantes".

¿Pueden hacer una evaluación de ésta normativa a dos meses de su promulgación?

"La Ley Emilia ha sido aplicada de forma correcta por gran parte de los jueces y fiscales, hay que denunciar a quien no lo haga. De esta forma se ha logrado prisión preventiva a los responsables de los crímenes asociados al manejo de estado de ebriedad. Ello ha implicado que menos personas se arriesgan a manejar con alcohol, las cifras oficiales indican una sustantiva baja de este comportamiento, con lo que esperamos iniciar un cambio cultural global en toda la sociedad".

¿A su juicio qué es lo que le falta a Ley Emilia para que consiga más eficacia de la que ya ha conseguido?

"Lo que falta, es mejorar los instrumentos que miden alcohol y sustancias psicotrópicas en la conducción. El estado debe hacerse responsable de mejorar los sistemas de medición, más modernos, seguros y confiables, para dotar a carabineros de mejores herramientas en la detención de este tipo de crímenes".

¿Esperan en un futuro próximo estar presentes en otras regiones también o se concentraran sólo en Viña del Mar?

"La Fundación tiene una dimensión nacional, ya que este es un problema nacional. Recordemos que los accidentes viales son la primera causa de muerte de niños y niñas de 0 a 14 años, y la segunda de personas entre 15 a 30 años. Por ello esperamos en el mediano y largo plazo desarrollar nuestras acciones a escala nacional".